la veterana actriz puertorriqueña Rita Moreno, ganadora de un Oscar en 1962, cree que las actrices latinas “todavía están estereotipadas” y se declara “orgullosa” de seguir trabajando en plena forma en la segunda temporada de la comedia Día a día. “Me siento tan feliz, pero sobre todo tan orgullosa de que a los 86 años aquí estoy funcionando, no sólo como mujer, adulta, ser humano, sino como actriz trabajando, y que en realidad me están pagando por algo que quiero con toda mi alma”, dijo a Efe en Miami. Rita Moreno, Isabella Gómez y Justina Machado interpretan a la abuela, la madre y la hija de una familia de origen cubano en la citada serie de Netflix. “Las actrices latinas todavía estamos estereotipadas. Tenemos que unirnos. Hay que perseverar”, dice Moreno, quien pone como ejemplo a la comunidad cinematográfica afroamericana.
En los años 90, Justina Machado grabó un episodio piloto muy especial. Era la primera vez que tenía un papel protagonista, pero la aventura se frustró porque, según le dijeron, el público estadounidense no estaba preparado para tener una serie de latinos en horario de máxima audiencia. Algo ha tenido que cambiar para que Machado, estadounidense de origen puertorriqueño, acabe de estrenar la segunda temporada de Día a día, en la que interpreta a una madre soltera cubana, que vive con sus hijos, estadounidenses de primera generación, y su madre, una cubana de la vieja escuela (Rita Moreno). Machado cree que el momento político que atraviesa EE.UU. explica por qué cada vez más familias blancas ven ficción protagonizada por latinos. “Siento que ahora todo el mundo está entendiendo que estamos en el mismo barco y están empezando a preocuparse por los demás”, dice Machado, que cree que representar a las minorías en televisión es “un camino largo” y requiere la complicidad de los estudios. En la primera temporada, la hija en la ficción de Machado, que interpreta Isabella Gómez, se declara lesbiana y, desde entonces, la joven actriz recibe a diario mensajes de agradecimiento de sus fans. “Es una locura. No solo me escriben para darme las gracias, también hay un montón de adolescentes que me dicen que aún no han salido del armario porque no se sienten del todo cómodos, pero que al verme a mí se han sentido más representados y más normales”, asegura Gómez.
Rita Moreno recuerda sus inicios en la gran pantalla, cuando sólo tenía 17 años, para comparar aquellos tiempos con los de ahora. “Cuando yo empecé era horrible, era una profesión cruel, malísima para mí siendo una joven puertorriqueña o latina”, recordó la Anita del musical cinematográfico West Side Story, un personaje que le valió el Oscar a la mejor actriz de reparto. Asegura que el panorama “está cambiando poco a poco”. “Tenemos que unirnos y creer en la esperanza”, aseveró la única actriz latina en ganar un Oscar, un Emmy, un Grammy y un Tony, algo que sólo han logrado doce personas en la historia, entre ellas otras tres mujeres: Helen Hayes, Audrey Hepburn y Whoopi Goldberg. Respecto a la ausencia de actores latinos nominados a los Oscar, se remitió a las palabras de Viola Davis: “Si no nos dan los papeles, no hay nominaciones. ¿Cómo van a recibir premios de nada si no hay los papeles para los actores?”, se preguntó.
Con más de 70 años de trayectoria, Moreno vive con máxima intensidad su papel en Día a día, una serie que no considera la “típica” sitcom y que trata temas como el miedo a la deportación, la depresión, el racismo o la homosexualidad de forma cómica, sin dañar su trascendencia. La abuelita, como la llaman en la serie, se esfuerza en poner un acento latino, en este caso cubano. “A mí lo que sea, soy actriz. Yo puedo ser lo que el papel requiere. Mi personaje también tiene sus prejuicios y es tan teatral y dramática..., por eso me encanta y para una actriz como yo eso es divino para entretener y hacer gracia”, asegura.