La Fiesta de la Vendimia tradicionalmente ha servido para abrir esa temporada de trabajo. Este año parece que se ha adelantado un poco...
Pues sí, este año ya hemos arrancado. El cambio climático nos lleva a que cada vez más las vendimias sean más tempranas. Antes era impensable estar vendimiando en la primera quincena de septiembre y ahora parece que nos va a tocar más a menudo.
¿Va a condicionar esto la participación de la gente en la fiesta?
Seguramente, porque hay mucha gente de Rioja Alavesa que acude y, lógicamente, si estamos vendimiando no va a dejar de hacerlo para acudir, sobre todo en las bodegas más pequeñas.
¿Según están yendo las cosas qué se espera de la vendimia de este año?
Está siendo un 2022 bastante seco y eso influye mucho en la uva. Si cayesen ahora 20 litros podría haber mejor previsión, pero si no lo hace la merma será importante,
Pero si cae agua el día de la fiesta...
Somos un poco contradictorios, sí. Por un lado queremos agua, estamos deseando que caiga para que engorde la uva, pero si cae agua hoy nos desluce la fiesta. No sabemos cómo acertar en eso de pedir.
Después de dos años sin que se haya celebrado por la pandemia, ¿nota ganas de celebración?
Muchas. Es la fiesta más importante de la comarca y tenemos muchas ganas, pero sigo recalcando que el tema de la vendimia va a condicionar porque lo primero es lo primero. Hay muchas bodegas grandes que igual dejan de cortar el domingo, pero las pequeñas…
¿Cuánto tiempo llevan preparando todo?
Desde febrero. Ahí es cuando se producen todos los años las primeras reuniones con el ayuntamiento al que le toca preparar, en este caso Lanciego. La Fiesta la Vendimia la organiza la Cuadrilla, tenemos mucha experiencia, pero la labor y coordinación con los ayuntamientos y sus gentes es vital. Además, es que es una fiesta porque es una fiesta de todos/as, en la que todos los pueblos están representados y así lo vivimos.
¿Qué destacaría del programa que habéis preparado?
Destacaría el concurso de vinos que no está en el programa propiamente dicho del día de la Fiesta pero es muy importante. No se ha dejado de hacer ni en pandemia. Este año se han presentado 199 vinos de todas las categorías, un poco menos que el año pasado que rondaron los 240.
¿Hay explicación para ese descenso?
Probablemente tras las vacaciones se han encontrado con la vendimia de cara y se han preocupado más por ella que por llevar los vinos a la Cuadrilla para el concurso. Estoy casi seguro que será por este motivo.
¿Para la comarca qué supone esta celebración?
Es un momento de encuentro entre la gente de la zona, pero también darnos a conocer. Hay mucha gente asidua a la fiesta que no falla, pero también sirve para que mucha gente que no la conoce se acerque, pruebe nuestros vinos y la zona.
La Fiesta llega con el debate sobre la denominación encima de la mesa.
Ese tema está más en los medios que en el día a día de la gente. Es obvio que preocupa e interesa, pero la gente que está más metida igual lo vive de manera más intensa. El resto se preocupa de hacer las cosas medio bien y sacar sus producciones adelante.
¿Qué sabor de boca le gustaría tener mañana después de la celebración?
Me gustaría poder decir que ha habido incidentes, que todo ha salido bien, que la gente lo ha pasado de maravilla y que se hable de la Fiesta de la Vendimia como algo positivo, de disfrute y cosas buenas. Con eso me doy por satisfecho.
