La Ertzaintza investiga el fallecimiento de una vecina de Bermeo que había solicitado asistencia sanitaria en su domicilio, tras comprobar que dos ambulancias de la red de transporte urgente de la zona habían sufrido sendos sabotajes.
Según informó ayer el Departamento vasco de Seguridad, en los últimos días alrededor de una treintena de ambulancias han sido localizadas en Bizkaia con daños en las lunas, las ruedas o los espejos retrovisores, “produciéndose, como consecuencia de estas acciones delictivas, retrasos en los servicios que debían realizar”.
Durante la madrugada del pasado sábado la Ertzaintza tuvo conocimiento de que dos ambulancias de carácter urgente de Gernika y Bermeo habían sido objeto de sabotajes, “detectándose los daños en el momento en que debían dirigirse a un domicilio de Bermeo para acudir a una emergencia”.
Tras tener conocimiento del fallecimiento de la mujer, que había solicitado asistencia sanitaria y estaba siendo atendida en su casa por un médico de Osakidetza, y “ante los posibles retrasos que se han podido originar al no encontrase operativas por los daños que presentaban las ambulancias urgentes de la zona”, la Ertzaintza puso en marcha una investigación para esclarecer las circunstancias en que se produjo el suceso.
Por su parte, la empresa concesionaria del servicio de ambulancias La Pau denunció que ayer había sido saboteada una ambulancia que acudía a Bermeo para atender a una mujer en parada cardiorrespiratoria, que finalmente falleció.
Según señaló la empresa en una nota, recogida por Efe, una ambulancia de Gernika sufrió el pinchazo de las ruedas y la rotura de las lunas “cuando acudía a trasladar a una paciente de 71 años en parada cardiorrespiratoria en Bermeo, a la que un médico estaba realizando maniobras de reanimación”.
“Esta unidad -añadió- procedía de la base de Gernika porque el vehículo de la base de Bermeo había sido saboteado previamente y no pudo realizar la asistencia urgente”.