Alfredo y Ander, taxistas de Arraia-Maeztu y Peñacerrada-Urizaharra, son conductores que desempeñan labores para el Gobierno Vasco relacionadas con el transporte escolar en Álava desde hace aproximadamente diez años. Este año les ha surgido un problema que no han tenido hasta ahora, y es que llevan varios meses reclamando unos impagos por parte del Gobierno Vasco.
Dichos pagos se llevan retrasando desde enero, como aseguran los conductores. Los pagos responden a facturas del servicio de taxi para Educación, teniendo estas una cantidad indefinida diariamente.
Para intentar remediar esta situación, los conductores han entablado varias conversaciones telefónicas a lo largo de estos últimos meses con varios integrantes del Gobierno Vasco, pero según cuentas los implicados desde la institución pública les han comunicado que la causa del retraso en los pagos de las facturas se debe a un fallo informático, asegurándoles percibir esa cantidad pronto.
Sin embargo, los taxistas escolares aseguran que aún hay facturas por cobrar, y que de momento el Gobierno Vasco no está siendo capaz de cumplir con lo prometido.
Las exigencias del Gobierno Vasco para poder trabajar
El Gobierno Vasco exige ciertos requisitos que consideran trascendentales para que los conductores puedan desempeñar su labor de la mejor manera posible. Uno de ellos es poseer vehículos de menos de diez años de antigüedad.
Respecto a la situación de sus compañeros de gremio, uno de los taxistas explica cómo no son los únicos que se encuentran en esta situación, sino que conocen a algún otro compañero que está en una situación similar.
Por otra parte, cuentan cómo los otros compañeros están empezando a cobrar esas facturas, pero ellos aún no lo han hecho. Eso sí, a corto plazo, y a pesar de que llevan arrastrando esta problemática varios meses, se muestran bastante optimistas porque, al ver que otros compañeros están empezando a cobrar las facturas retrasadas, ellos creen que más pronto que tarde les tocará el turno también.