El tribunal regional de Przemyśl, en el sureste de Polonia, ha decidido prolongar por otros tres meses la detención en prisión preventiva del periodista vasco Pablo González, detenido el pasado 28 de febrero.

"El tribunal decidió prorrogar la detención de Pablo González", dijo a EFE el abogado del periodista en Polonia, Bartosz Roga'a, quien agregó que la corte coincidió con la Fiscalía en la mayoría de premisas para mantener en esa situación al español.

Días atrás la Fiscalía había justificado su petición en "una bien fundada preocupación por un fraude de procedimiento, temor de ocultamiento o fuga y el hecho de que sobre González pesa un riesgo de una pena elevada si es condenado".

Roga'a confirmó que recurrirá la decisión ante el Tribunal de Apelación.

El periodista "freelance" fue detenido el 28 de febrero en Przemyśl, donde cubría la crisis de refugiados provocada por la agresión rusa a Ucrania.

La Agencia Polaca de Seguridad Interna (ABW) acusó a González, que tiene doble nacionalidad española y rusa, de realizar actividades para la inteligencia militar rusa GRU, por lo que se puede enfrentar a hasta 10 años de prisión.

Inicialmente González fue detenido por tres meses y a finales de mayo se prorrogó por otros tres.

La defensa de González recurrió esa decisión, pero en julio el Tribunal de Apelación de Rzeszów la rechazó.

A finales de julio, la pareja de González, Oihana Goiriena, y su abogado, Gonzalo Boye, presentaron una solicitud al Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ACNUDH) para que investigara la detención "arbitraria" del periodista.

Según Boye, las autoridades polacas detuvieron a González exclusivamente por el hecho de que el periodista tiene doble nacionalidad española y rusa.

En los últimos días, Goiriena indicó que las vías de contacto con González siguen limitándose a escribir cartas, aunque la pareja del periodista las recibe con un retraso de un par de meses.

La detención de González provocó las protestas de muchas personalidades y organizaciones.

En junio, la Asociación Pro Derechos Humanos de España (APDHE) instó al Gobierno español y a los organismos de la Unión Europea a actuar en defensa de los derechos de González y de la libertad de prensa.

En marzo, las Federaciones Internacional y Europea de Periodistas afirmaron que la detención de González es un ataque a la libertad de prensa y a la democracia y llamaron al Gobierno polaco a su puesta en libertad.