Una cuarta parte del territorio está protegida en Euskadi. Así se desprende del Perfil Ambiental que presentó ayer el Gobierno Vasco en el marco del Día Mundial de la Biodiversidad que se celebra mañana.

De ese modo, la CAV se acerca a la meta marcada por la UE, que marca en el 30% la superficie que debe tener para el año 2030 con protección jurídica.

El estudio, que publica anualmente Ihobe, aborda en esta ocasión el tema de la biodiversidad en el territorio, para lo que analiza 35 indicadores medioambientales, económicos y sociales.

Según los datos que recoge el Perfil de Biodiversidad, el 24,2% del territorio está protegido, lo que supone un total de 175.330 hectáreas. Con estos datos, explican desde el Gobierno Vasco, Euskadi “se acerca a la meta marcada por la Estrategia de la UE sobre Biodiversidad para 2030”.

Esta estrategia también prevé que al menos un 30% de hábitats y especies alcancen un estado de conservación favorable, obtenido ya por el 22% de los hábitats de interés de Euskadi en el periodo 2013-2018.

En cuanto a especies, destacan datos positivos como que el 37% de las aves analizadas han incrementado sus poblaciones y el 20% del resto de especies muestran un estado de conservación favorable. Entre las que mejores resultados presentan, están los anfibios, reptiles y mamíferos, además de aves que viven en entornos urbanos, de alta montaña y forestales.

Sin embargo, como nota negativa del informe sobre el perfil ambiental de la CAV, “preocupa” la población de aves en el medio agrario, que ha caído un 44% en la última década. También se ha reducido un 85% la biomasa del alga roja en la costa vasca en un periodo de poco más de 25 años.

Por otro lado, se ha detectado un fuerte aumento en los últimos años de las mariposas en medios forestales, peces como la trucha y el gobio. Otras como el salmón se han estabilizado, mientras que la anguila sigue en retroceso.

En materia de inversión, se estima que la gestión de la Red Natura 2000 en Euskadi durante el periodo 2021-2027 será 119 millones de euros. Según un estudio que realizó el Gobierno Vasco sobre los espacios de la Red Natura, el valor económico de los servicios y beneficios que reportan es siete veces superior al gasto directo que se hace en esos lugares.

“Esto quiere decir que, por cada euro que se invierte, hay 7 euros de retorno en beneficios, tales como el abastecimiento, es decir la cantidad y variedad de productos que se extraen del bosque o del mar, y regulación, ya que esos espacios captan y almacenan carbono, contribuyen a la depuración y suministro de agua potable, al control de la erosión del suelo, mitigan los daños por inundaciones, mejoran la calidad del aire o facilitan la polinización”, precisaron desde el Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente.

Con respecto al turismo, se incluyen datos como que en 2019 el motivo de viaje del 13,9% de las visitas recibidas en Euskadi era disfrutar de la naturaleza y el turismo rural, un porcentaje que se prevé al alza, según el Gobierno Vasco.

Por otro lado, Euskadi, que ocupa algo menos del 1% del territorio de la Unión Europea, acoge aproximadamente el 35% de sus hábitats de interés, según subraya el Ejecutivo vasco.

Por ese motivo, “su pérdida es una amenaza a la que se debe hacer frente desde todos los niveles de gestión para reforzar la resiliencia del territorio y prevenir la aparición y propagación de enfermedades en el futuro. La pérdida de biodiversidad pone en peligro la seguridad alimentaria y la nutrición, agrava la crisis climática y afecta a la economía”, destacaron desde el Ejecutivo. l

35%

A pesar de que Euskadi solo ocupa el 1% del territorio de la Unión Europea acoge el 35% de sus hábitats de interés.

Pacto verde

La protección de la Biodiversidad es una de las líneas de trabajo del Pacto Verde de Euskadi, la hoja de ruta elaborada por el Gobierno vasco para el territorio para conseguir un “desarrollo justo y sostenible”.

Conservación

La estrategia de la UE sobre Biodiversidad para 2030 también prevé que al menos un 30% de hábitats y especies alcancen un estado de conservación favorable, obtenido ya por el 22% de los hábitats de interés de Euskadi en el periodo 2013-2018.

3%

Solo un 3% de las personas encuestadas señala la pérdida de biodiversidad como la cuestión medioambiental más importante. La contaminación, cambio climático o deforestación son la mayor preocupación de la población vasca.