“Un toque de queda podría evitar incidentes nocturnos”

Erkoreka, que denunció la actitud “de personas y colectivos que actúan con absoluta irresponsabilidad y una insolidaridad tremenda” en la actual situación de pandemia, realizó un llamamiento a “la responsabilidad y solidaridad de la ciudadanía”, pero también defendió una intervención de la Policía vasca basada en “criterios de eficacia y proporcionalidad”.

El consejero de Seguridad recordó que no es la primera vez en esta pandemia que tiene que salir para denunciar “abiertamente” ante la opinión pública la actitud y comportamientos “de personas y colectivos que actúan con absoluta irresponsabilidad y con una falta de sentido cívico absoluta”.

En este sentido, apuntó que estas personas, no solo “se resisten al cumplimiento de las normas que las autoridades de salud pública han establecido para poner freno a la pandemia, sino que, además, enfrentan abiertamente y dificultan la labor de los servicios policiales, que están habilitados, precisamente, para garantizar el efectivo cumplimiento de esa normativa”. Erkoreka resaltó que no se trata de “una normativa caprichosa”, sino que ha sido diseñada por las autoridades de salud pública y es “homologable a la que está en vigor en muchas otras partes”.

Por ello, volvió a realizar “un llamamiento a la responsabilidad y la solidaridad de ciudadanía”. “En un momento de dificultad como el actual, en el que las cifras cotidianas de evolución de la pandemia arrojan un resultado francamente preocupante, una preocupación que transmiten el Gobierno y la consejera de Salud, día tras día, cada vez que tiene que dar cuenta de los datos de contagios y del creciente impacto hospitalario, es de una absoluta irresponsabilidad, de una incivilidad sin nombre y absolutamente insolidario seguir actuando con esa insistencia en el incumplimiento”, recalcó.

El titular de Seguridad señaló que la Ertzaintza actúa con los medios de personal que tiene disponibles y precisó que hasta que salga la próxima promoción de Arkaute se dispone solo de los efectivos actuales. “Hay casi 900 efectivos menos de los que correspondería a la plantilla. Cuando concluya el curso, dispondremos de más efectivos y, de esa manera, iremos respondiendo al plan de rejuvenecimiento de la Ertzaintza y de adecuación a la plantilla oficialmente aprobada”, añadió.

En cuanto a otros medios, Erkoreka señaló que la Ertzaintza debe operar en base a criterios de eficacia, pero también de proporcionalidad. “Estamos hablando, en muchos casos, de situaciones que se producen a elevadas horas con concurrencia de muchas personas y muchas de ellas con elevados niveles de alcohol ingeridos”, destacó. En estas circunstancias, “hay que medir mucho y muy bien” las intervenciones. A su juicio, los mandos de la Ertzaintza “lo hacen de manera muy ponderada”, para que su actuación “no produzca efectos contraproducentes”.

Denuncias. La Ertzaintza y las policías locales propusieron multas a 104 personas que infringieron desde el viernes hasta el domingo las normas sanitarias vigentes.

Causas. Quince fueron tramitadas por infracciones relacionadas con el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, en los denominados botellones, mientras que 27 fueron por no usar mascarilla.

Territorios. Diez denuncias formuladas en Araba, 37 en Bizkaia y 57 en Gipuzkoa.