Madrid - Todos los grupos parlamentarios quieren que el futuro Pacto de Estado contra la violencia machista impida las visitas de los agresores a sus hijos, según avanzaba ayer la portavoz socialista en materia de Igualdad, Ángeles Álvarez. “En el marco de las negociaciones del pacto contra la violencia de género ha existido unanimidad respecto a la necesidad de legislar para evitar incluso las visitas de los padres violentos con los menores”, subrayó la diputada en declaraciones en el Congreso, donde aseguró que habrá que ver “cómo se plasma” esta medida en el acuerdo.

Álvarez registró ayer una proposición de ley para pedir un estudio sobre el impacto en los menores de la custodia compartida preferente, que recientemente aprobó el Congreso a instancias de Ciudadanos. Según la diputada socialista, antes de “lanzarse a legislar” sobre la custodia compartida “es preferente que se conozcan esas consecuencias” ante “los resultados desiguales y en algunos casos no muy buenos” que esta medida está teniendo en algunas comunidades.

En el texto presentado, recuerda que la implantación del régimen de custodia compartida ha pasado del 10,5% en 2011 al 24,7% en 2016, pero los juzgados de familia “no hacen ningún tipo de seguimiento de sus consecuencias en los menores”. En este sentido, a la diputada le parece “muy poco oportuno” ir a una legislación que “pone en manos de los jueces la decisión de cómo tiene que ser la convivencia entre los excónyuges y sus hijos”, más aún cuando en España más del 80% de las separaciones se produce de mutuo acuerdo. En estos casos, desde las filas socialistas apuestan por que sean los padres “quienes negocien cuál es el modelo de custodia y de relación con sus hijos”. “No nos parece razonable que sea un tercero que no conoce las circunstancias al detalle de ese grupo familiar el que diga cómo tiene que establecer su relación”, enfatizaba Álvarez. De ahí que haya pedido que el Congreso, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la Fiscalía elaboren este documento ante los resultados “desiguales y no muy buenos en algunos casos” que la custodia compartida impuesta está teniendo en algunas comunidades.

En definitiva, la subcomisión creada en el Congreso para elaborar ese Pacto de Estado quiere que se prohiban las visitas de padres violentos a sus hijos e incluirá esta medida en el informe que deberá ser aprobado antes del próximo 31 de julio. El informe, que el órgano ultimará en las reuniones que tiene previstas para los próximos días debe incluir las principales medidas que, según los partidos representados en el Congreso, el Gobierno español debe poner en marcha para terminar con la violencia machista.

Durante más de cuatro meses la subcomisión ha escuchado a puerta cerrada a numerosos expertos y agentes implicados en esta materia que han hecho sus propias propuestas. De hecho, la cantidad de información recopilada en este tiempo y la falta de acuerdo en algunos temas, ha llevado al órgano a solicitar en hasta dos ocasiones la prórroga del plazo de entrega del informe. - Efe/E.P.

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