Santander - El ministro de Justicia, Rafael Catalá, subrayó ayer la necesidad de reformar la “más que centenaria” Ley de Enjuiciamiento Criminal que, a su juicio, está “exhausta”, tiene “insuficiencias flagrantes” y está “alejada del modelo europeo”. Catalá apostó por una “reforma integral” de esta ley, asunto “largamente demorado”, pese a que existe un “consenso generalizado” porque el contenido del texto actual es “de difícil y compleja aplicación”. Según resaltó, la mayor parte de las fuerzas políticas llevan en sus programas esta reforma, por lo que “esperemos que sepamos avanzar en esa dirección”.
Así se expresó Rafael Catalá al inaugurar la tercera edición de encuentro Una Justicia de futuro, que durante dos jornadas se imparte en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander. Catalá aboga por una “reforma profunda que acabe de una vez por todas con juicios interminables de años y años de instrucción que perjudica la imagen de la justicia”. Pero matizó que la reforma “no va de que los fiscales instruyan o investiguen, sino de dejar atrás el actual sistema inquisitivo para implantar un modelo acusatorio dejando todo el protagonismo al juicio oral”. Y también, señaló, simplificar procedimientos y recursos para ir a un procedimiento único, ordinario, más garantista y con menos formalismo. Por otra parte, Catalá consideró necesario una reforma del proceso civil, porque, lamentó, los indicadores de la actividad de la justicia ponen de manifiesto un “bajísimo” índice de ejecución de las sentencias civiles. - Efe/E.P.