BILBAO. Según ha informado hoy el departamento de Seguridad, los principales problemas de circulación se esperan para la tarde del miércoles 12 y la mañana del Jueves Santo, ya que en los últimos años el retorno de las vacaciones ha producido menos retenciones.
Como es habitual, los puntos más conflictivos serán la A-8 en el límite entre Bizkaia y Cantabria, el enlace de la AP-1 con la A-1 en ArmiñóN y, sobre todo, la AP-8 en el peaje de Beriatu por los mayores controles de seguridad tras los atentados de los últimos años en Francia.
La Ertzaintza dispondrá de unos doscientos agentes en las principales carreteras vascas para favorecer una circulación fluida.
La directora de Tráfico, Sonia Díaz de Corcuera, ha hecho hincapié en la necesidad de evitar las distracciones cuando se conduce y en respetar los límites de velocidad y ha recordado que en 2016 el 75 por ciento de las multas tramitadas (291.300) fueron por exceso de velocidad (215.790).
En cuanto a la siniestralidad, en los últimos cinco años ha descendido en Semana Santa y se ha pasado de 123 accidentes en 2012 a 73 el año pasado y también ha bajado el número de heridos en esos siniestros.