baigorri - La historia del Castillo de Baigorri ha sido la de un ir y venir de propietarios. Los orígenes se remontan al siglo XI, indica el profesor de Historia de Baiona Antton Curutcharry, cuando en 1033 el rey de Pamplona nombra Vizconde de Baigorri a una persona de su confianza que era hermano del Vizconde de Bizkaia. “Hay información de todo el linaje desde 1033 hasta 1832. Parece que el castillo era la residencia familiar y no sabemos si tenía derechos sobre el pueblo porque no hay documentos”. Se cree que el castillo original era de madera y que en el siglo XVI se amplía y rehabilita. En el XVII se abrieron ventanas verticales y el inmueble adquirió una imagen más de palacio que de castillo, añade Curutcharry. Hasta el siglo XIX, el castillo es sede del linaje de los Etxauz, vinculado al vizcondado desde 1350. En 1425, Carlos de Etxauz casa con Margarita de Beaumont emparentando la Casa de Etxauz con la casa Real de Navarra.
La rama dinástica, explica Antton, se acaba en el siglo XIX con la última hija del matrimonio San Martin de Caupenne d’Amour de Etxauz que, casada con el Mariscal Harispe, defensor de los montes en la guerra de la Convencion, muere sin descendencia. En 1832, los herederos venden el castillo a la familia Abbadie d’Arrast, uno de cuyos hijos, Carlos se queda en Baigorri. Parte de la familia emigra a Argentina y a EEUU y uno de ellos, Harry Abbadie, reside en Holliwood donde trabaja como escritor y director y es amigo de Charles Chaplin, el popular Charlot quien viajó hasta en tres ocasiones al Chateau de Baigorri (entre 1924 y 1931). La historia del caserón continua en la II Guerra Mundial, con la ocupación alemana del castillo. En 1976, la viuda de Abbadie vende el castillo que durante 15 años va cambiando de manos con un continuo deterioro. Uno de los propietarios es un vecino de Baigorri, de apellido Bidart, que divide la propiedad, dejando el palacio con los jardines que dispone en la actualidad. En 1993, el matrimonio Pierné de Baiona lo adquiere y lo rehabilita como hotel de lujo y en 2003, lo compran los actuales propietarios: Ajit Asrani y Maria Alicia Urrutia, que lo quieren vender. - L.C.H.
