Bilbao - Diecinueve años de prisión por el asesinato a su marido Koldo Losada. Esta es la pena que le ha interpuesto el juez Juan Mateo Ayala a Jon Ezkurdia, después de que el pasado 25 de febrero los nueve miembros del jurado popular declararan por unanimidad culpable de asesinato a Ezkurdia. El fallo dictado por la Audiencia Provincial de Bizkaia impone además al condenado la prohibición de aproximarse a menos de 800 metros a los hermanos y la madre del fallecido durante un periodo de 29 años y, también, le obliga a indemnizar a los allegados del actor con 25.000 euros. La sentencia se ajusta en gran medida a lo que el Ministerio Fiscal y la acusación particular habían pedido, ya que ambas partes solicitaron 20 años de prisión para el acusado.

Según se recoge en la sentencia hecha pública ayer, el tribunal considera probado que el pasado 19 de noviembre de 2014, “en una hora que no puede precisarse pero que se sitúa entre las 13.50 y las 18.27 horas”, y cuando el matrimonio se encontraba en el domicilio que compartían en la calle Lersundi, Ezkurdia “le golpeó reiteradamente en la cabeza con un objeto contundente y con alguna arista con la intención de acabar con su vida”. Los golpes, hasta cuatro, causaron un traumatismo craneoencefálico que le originaron la muerte por hemorragia cerebral traumática, según se detalla en el fallo. Además, también se consideran hechos probados que Ezkurdia golpeó a su marido hasta causarle la muerte, aprovechando que éste se encontraba adormecido por la ingesta previa “de unos medicamentos sedantes e hipnóticos y no le dio oportunidad de huir o defenderse, atacándole de modo sorpresivo, súbito e inesperado”.

No bajo los efectos del alcohol No obstante, y en este mismo contexto, para el tribunal no ha quedado acreditado que Ezkurdia se encontrara bajo los efectos del alcohol cuando cometió los hechos, por lo que tampoco queda demostrado en el condenado “alteración de la conciencia”. Lo que sí se considera acreditado es la propia presencia de Ezkurdia en la escena del crimen, ya que la sangre de la víctima aparecía en la suela de la zapatilla de Ezkurdia.

Según se detalla en el fallo, el 19 de noviembre de 2014, Jon Ezkurdia salió de su vivienda cinco minutos antes de que el reloj marcara las tres de la tarde; llevaba consigo una bolsa de basura negra que depositó en un contenedor cercano al domicilio, según se aprecia en el visionado de las cámaras que grababan el interior del portal. Además, el hombre también llevaba la correa del perro colgada al cinturón. Horas más tarde, y en ese mismo contenedor, la Ertzaintza halló unos cojines manchados con la sangre de Losada junto al cuerpo ya sin vida de Gastón, el perro de la pareja y la correa que llevaba Ezkurdia. No obstante, no ha quedado demostrado que Ezkurdia también matase al perro, algo que tampoco se debatió en el juicio dado que el animal no tenía el ADN del condenado.

Lo que el fallo recalca es que el asesinato se cometió con alevosía y que, además, concurre el agravante de parentesco, dado que Jon Ezkurdia y Koldo Losada llevaban casados desde 2013 y formaban una pareja con más de veinte años de relación.

Satisfacción Tras hacerse pública ayer la sentencia, la letrada de la familia Losada, Ana Palacio, aseguró estar “satisfecha” con la resolución. En declaraciones a DNA, Palacio aseguró que la familia y ella estaban “muy contentos” con la sentencia: “Ha sido un camino difícil, pero ya hemos visto la luz. La sentencia ha sido ajustada a derecho y se ha basado en un veredicto muy trabajado que ha recogido el sentir popular, o al menos del jurado”. Además, y en esta misma línea, la letrada de la familia de la víctima aseguró que el juez también había razonado muy bien su decisión de los 19 años de prisión para Ezkurdia.

“En la sentencia se recoge y queda claro que es un crimen que se comete en la intimidad del hogar donde uno está más relajado y no espera que le vaya a pasar nada malo; menos que su pareja le vaya a hacer algo así. La sentencia ha sido dura pero justa y muy bien motivada. El jurado popular ha trabajado de una manera impecable”.

Ahora se inicia otra fase ya que Jone Gorizelaia, la abogada de la defensa, ya anunció que presentaría recurso si la sentencia era condenatoria.