DONOSTIA. Las instituciones competentes se mostraron ayer dispuestas a colaborar en la reconstrucción de la costa guipuzcoana, arrasada por un fortísimo temporal en la madrugada del domingo. En el balance del día después del desastre, el alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, aseguró que los daños "son mayores de lo esperado", aunque también se mostró positivo ya que, según recalcó, los responsables de la Diputación, del Gobierno Vasco y del Gobierno del Estado le habían mostrado su "total disposición" a colaborar en la financiación de las reparaciones necesarias de la costa donostiarra.
Por su parte, el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la consejera de Medio Ambiente, Ana Oregi, visitaron tanto Donostia como Zarautz, con el fin de comprobar in situ la magnitud de los destrozos. Los representantes institucionales coincidieron en asegurar que aún es pronto para concretar los daños sufridos, así como en evaluar económicamente la magnitud de la catástrofe, de la que se contabilizarán centenares de afectados en Gipuzkoa. Sólo en la reunión convocada en la mañana de ayer en el consistorio donostiarra, decenas de personas acudieron a conocer cómo enfrentarse a su situación en relación con los seguros.
Por su parte, el ministro de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, se trasladó ayer a la playa vizcaína de Bakio, también arrasada por el temporal, y manifestó que, una vez analizado el impacto del oleaje en los arenales vascos, la institución que dirige se coordinará con los distintos ayuntamientos concernidos con el fin de que las playas estén operativas el próximo verano.
El trabajo para poner en marcha los arenales donostiarras, por ejemplo, se espera intenso. Habrá que reponer las barandillas arrancadas de cuajo por las olas en la Zurriola y La Concha. Parte de esta última, la comprendida entre la primera rampa y La Perla, iba a comenzar a repararse este verano. Además, las cabinas de la Concha se encuentran muy deterioradas, según manifestó la concejala de Infraestructuras, Nora Galparsoso, pero los servicios municipales no habían podido entrar aún ayer a inspeccionarlas ya que la arena había tapado los accesos. Además, las tuberías que llevan agua a las duchas y grifos de las playas se había roto en numerosos puntos.
Paseo nuevo Por otra parte, representantes del Ayuntamiento, con el alcalde a la cabeza, y acompañados por el lehendakari Urkullu, la consejera Oregi y el diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, visitaron el Paseo Nuevo, que se hallaba cerrado desde antes del temporal por precaución a causa de los desprendimientos de la ladera, que iba a iniciar en breve sus obras de estabilización. Vista la situación del paseo, con partes íntegras desgajadas como el mirador curvo conocido como el Rompeolas y sus cimientos al aire, quedó claro que el proyecto de estabilización de las laderas no será el único necesario abordar antes de abrir al público este concurrido paseo costero.
Otra de las actuaciones que será necesario ejecutar para que las playas donostiarras estén disponibles cuanto antes será la reconstrucción de parte del espigón de la Zurriola, afectado por una importante mordida de las olas. Esta obra corresponde a Costas, cuyo representante, el subdelegado del Gobierno, José Luis Herrador, asistió también a las reuniones de ayer con los responsables municipales.
En el sistema viario, el temporal volvió a afectar a carretera entre Getaria y Zarautz, que quedó cortada por un gran socavón, aunque estaba previsto que se abriera en la tarde de ayer. La del faro de Higer, en Hondarribia, sin embargo, requerirá cerca de un mes para estar operativa, según las primeras previsiones.
Por otra parte, el diputado general anunció que se reunirá el jueves con los alcaldes de los pueblos afectados por el temporal. Los Bomberos de la Diputación tuvieron que realizar numerosas salidas el domingo tanto en Zarautz, con siete garajes inundados, como en Deba y Mutriku, donde peligraban unos depósitos de gasoil. Por su parte, en Donostia, cerca de una treinta de bomberos, así como 80 guardias municipales, estuvieron en las calles de servicio durante el temporal. El alcalde les agradeció su labor, así como la de los numerosos voluntarios que se incorporaron a las tareas de prevención y actuación frente al temporal.
Por su parte, el exalcalde de Donostia y actual diputado socialista en las Cortes, Odón Elorza, recordó ayer que ha solicitado recientemente al ministerio de Medio Ambiente el refuerzo de la escollera del Paseo Nuevo con más bloques de piedra, con el fin de mitigar el impacto del mar sobre el muro de costa. También señaló que ha presentado, sin éxito, enmiendas a los presupuestos para reforzar el espigón de la Zurriola. Los socialistas del Ayuntamiento, por su parte, se ofrecieron a "trabajar codo con codo" con el Gobierno local para ayudarle en lo que sea necesario y, también, para lograr la financiación necesaria para la reconstrucción.
