MADRID. "Si hay que hacer un sacrificio, que nos bajen la asignación presupuestaria del capítulo de personal, pero que nos dejen -reclama en una entrevista con Efe- la autonomía de poder diferenciar el tipo de profesorado que queremos para el dinero disponible."

Alude así a la limitación de la reposición de las bajas de funcionarios por jubilación al 10 % de las vacantes, dispuesta por la Administración General del Estado como parte del plan de reducción del déficit público.

Las últimas estadísticas oficiales indican que el PDI de los centros propios de las universidades públicas acumula una caída del 1,5 % entre dos cursos (2010-2011 y 2011-2012) después de años de subida.

Preguntada por si la Universidad retrocede como motor de cambio, responde:"Vamos a perder fuelle sobre todo en investigación, un elemento realmente esencial para el desarrollo económico y social; es la generación del conocimiento al servicio de la sociedad".

Lo atribuye a "falta de inversión" pública y de las empresas, que prescinden de contratar innovación al verse en condiciones económicas peores.

Según la Conferencia de Rectores (CRUE), los gobiernos de las comunidades adeudan en conjunto a las universidades públicas unos 1.000 millones de euros, aparte de la reducciones presupuestarias.

Sobre la bajada de alumnos de las universidades públicas el curso pasado (-0,2 % en carreras y -5,4 % en másteres según las estadísticas oficiales provisionales), De la Calle se muestra prudente, pero constata que se matriculan de menos créditos en la Universidad de Málaga -de la que es rectora- y en las andaluzas en general.

Lo achaca al encarecimiento de las tasas de matrícula, especialmente las de repetición, y prevé que la tendencia siga.

"Me da un poco de angustia pensar que esto vaya a ser muy notorio", comenta, pues lo ideal es que los jóvenes sin trabajo aumenten su formación.

Sobre los que no pueden abonar la matrícula, señala que todas las universidades, como la de Málaga, han hecho esfuerzos para sacar convocatorias específicas de ayudas para quienes lo justifiquen.

En general, explica, los estudiantes se pueden acoger al fraccionamiento de las tasas en tres o cuatro veces en las nuevas matrículas.

Destaca que un número considerable de ayuntamientos pequeños se hacen cargo de algunos pagos y hay particulares y colegios profesionales dispuestos a becar. "La sociedad se ha volcado", enfatiza.

Sobre las becas del Ministerio de Educación, cree que una nota de 6,5 para acceder a las ayudas dinerarias universitarias desde este curso "perjudica" en buena medida la igualdad de oportunidades.

Preguntada por quienes buscan trabajo en el extranjero, De la Calle dice que ella lo haría al encontrarnos en un espacio único, el europeo.

"No me preocupa la movilidad, sino que perdamos ese talento -precisa-, que no vuelvan y que los españoles hagamos un esfuerzo por aumentar nuestra formación y luego lo disfruten otros".

Subraya que el paro es muchísimo menor cuanto más alta es la formación, que es una "inversión de futuro"; las empresas deberían contratar a profesionales para ser mucho más innovadoras y competitivas.

Las universidades, incide, convocan concursos de ideas empresariales y formación en emprendimiento para que los titulados constituyan su propia empresa.

En relación con la próxima reforma del modelo de ingreso en la Universidad, se pregunta para qué cambiar la selectividad si "funciona"; reclama que las pruebas que convocase cada universidad sean lo más homogéneas posible y reconocidas por todas ellas.

Niega De la Calle que sobren universidades y admite que sea necesario racionalizar un poco el mapa de titulaciones, pues parte de la oferta académica está repetida en entornos universitarios muy próximos, y aumentarla viendo las tendencias de la sociedad y del empleo.

En cuanto a una reforma de los mecanismos universitarios de toma de decisiones, la rectora cree que, probablemente, haya que hacer más ágiles estructuras de gestión y gobierno, aunque las universidades públicas, recuerda, están sujetas a unos procedimientos regulados.

"Es una salvaguarda para los ciudadanos -argumenta- que sepan que invierten en un lugar donde hay un control de cómo se hacen las cosas".

Y sobre un cambio de modelo de elección del rector, apostilla: "Todo el mundo nos quiere nombrar. Tenemos experiencias muy nefastas de nombramientos, por ejemplo en las cajas de ahorro ¿Eso ha sido eficaz? -se pregunta retóricamente- Pues si cambiamos, es para mejorar un sistema".