BILBAO. La Policía vasca, que ha intervenido unos 450.000 euros en efectivo y 380.000 euros en tabaco, acusa también a esta banda de organización criminal y blanqueo de capitales.

La banda desarticulada, que operaba desde hacía años, transportaba hasta Euskadi semanalmente unos 250.000 euros en tabaco ilegal desde Andorra con destino a bares y pequeños comercios de Vizcaya.

Los detenidos han sido diez varones y una mujer, de nacionalidad española y residentes en Vizcaya excepto dos que viven en el Principado de Andorra, y sus edades oscilan entre los 22 y los 59 años.

Con los arrestos se han intervenido 81.000 cajetillas de tabaco de contrabando de diferentes marcas como Winston, Lucky Strike, Marlboro, Ducados y Chesterfield, por un valor en mercado de más de 380.000 euros, y cantidades de dinero en metálico próximas a los 450.000 euros.

La Ertzaintza ha precisado que esta operación, denominada Kea, ha sido el resultado de una compleja investigación que se inició hace un año por informaciones recibidas en varias comisarías de la Policía vasca.

Ya desde el comienzo los investigadores determinaron que la red estaba asentada en distintas localidades vizcaínas, donde contaban con diversos locales de almacenamiento.

La red introducía el tabaco a España desde Andorra a través de la localidad de La Seu d'Urgell (Lleida) y utilizaba diferentes métodos para burlar la vigilancia fronteriza.

Posteriormente, por carretera y en muchas ocasiones utilizando vehículos lanzadera para evitar los controles policiales, el tabaco era transportado a las diferentes localidades vizcaínas.

La operación ha culminado este mes de mayo cuando estaban a punto de llegar desde Lleida dos cargamentos de tabaco de contrabando de importancia, uno de ellos utilizando un camión y vehículos lanzadera y el otro mediante el transporte en dobles fondos en vehículos manipulados para su ocultación.

La Ertzaintza estableció un dispositivo de vigilancia que detectó la llegada de los dos cargamentos, así como su posterior descarga y transporte a los garajes y lonjas que eran utilizados por la organización para el almacenaje.

La Ertzaintza investiga el destino del dinero generado de forma delictiva, aunque cuenta con pruebas que sostienen la acusación de blanqueo de capitales, según ha señalado el departamento vasco de Seguridad.

Se procedió asimismo al bloqueo judicial de las cuentas de los investigados, con cantidades de dinero importantes, en algunos casos superiores a los 200.000, así como de cajas de seguridad de entidades bancarias.

Las investigaciones siguen desarrollándose en la actualidad y no se descartan detenciones de más componentes de la red organizada en los próximos días, según la Policía vasca.