EL Ayuntamiento sólo cobró al circo que se instaló en el Iradier Arena 2.644 de los 264.000 euros que tenía que pagar y aún no ha recaudado el dinero que el cuartel de Sansomendi o la base de Araka tienen que abonar en concepto de tasa de basura. Son sólo algunos ejemplos -denunciados ayer por Bildu- de dinero que se escapa a las arcas municipales.

Desde que la crisis campa en los despachos de la Plaza Nueva, el discurso sobre la necesidad de reducir gasto se repite casi a diario y se traduce en recortes, que el gobierno justifica por la merma de ingresos. El Ayuntamiento necesita recaudar más para la caja común, sorprende por tanto que en el caso del Iradier Arena prácticamente regale el alquiler a quien organiza espectáculos. La maniobra es legal y, sin duda, busca la promoción del multiusos, pero hasta el interventor muestra sus dudas sobre este procedimiento en el caso del circo Wonderland. Aun así, el gabinete de Maroto defiende las bonificaciones, y mientras no decida reducir la tasa de alquiler -ahora es de 17.630 euros al día-, el concejal de Hacienda entiende que es mejor ingresar algo de dinero, que nada. De hecho, Manu Uriarte informó ayer de que frente a los cero euros de 2009, en lo que va de año, el alquiler del recinto ha dejado 11.600 euros en las arcas municipales.

Bildu, por su parte, además de que considera irregular este modo de operar, entiende que lo que el PP hace es intentar atraer espectáculos a toda costa al Iradier Arena para después poder justificar el multiusos con datos que avalen una alta ocupación. Además de las corridas de toros de La Blanca, por el pabellón han pasado en los últimos tiempos Manolo García, Melendi o Marea; se han exhibido productos gastronómicos como la trufa y fomentado el trueque de libros. El último evento fue el pasado fin de semana: un festival reggae con una entrada muy pobre. Y es que, a pesar de los esfuerzos del departamento de Cultura por promocionar el Iradier Arena, incluso con fuertes rebajas en el alquiler del recinto, el Ayuntamiento aún no ha logrado sacarle el partido que se espera obtener de un edificio que tanto costó a la ciudad.