MADRID. Así, la idea es que las personas que, por vivir y dormir en la calle, hacen un "uso privativo" del espacio público puedan ser trasladadas incluso a la fuerza a hospitales o recursos asistenciales, un punto fundamental para implementar una medida de este tipo, ya que según ha reconocido el propio alcalde nadie tiene "la autoridad moral" para echar a alguien de la calle a costa de "expulsarlo a otro espacio público porque no hay un sistema para acogerlo".
"Es un debate para toda España. Tenemos que aprobar una ley estatal que establezca que, cuando hay recursos públicos gratuitos y suficientes, sea obligatorio abandonar la vía pública. Estoy absolutamente a favor de eso. Es necesario un debate profundo sobre los usos de la vía pública", ha señalado el primer edil.
Y ha insistido en que "hace falta una reflexión sobre la compatibilidad" de los usos de la vía pública que dé prioridad al "uso mayoritario que reclaman los residentes, sobre todo en el centro" de la capital, si bien ha matizado que esto "no puede hacerlo el Ayuntamiento, sino el Estado" y ha asegurado que "hay muchos alcaldes de diferentes colores políticos que están de acuerdo".
En cualquier caso, ha reconocido que ésta no es materia para la actual campaña electoral municipal y autonómica porque precisa de una normativa estatal, pero ha asegurado que pedirá a su partido que incluya algún compromiso en esta línea en el programa con el que el PP concurra a las generales de 2012.
Además, ha considerado fundamental que los ayuntamientos cuenten con un marco legal que les permita regular los usos que se hacen del espacio público, no sólo en lo relativo a indigencia, sino también a comportamientos delictivos o que perturban la convivencia vecinal, como sucede con el ruido de los botellones.
Por último, el primer edil ha recordado que actualmente en Madrid "el sin techo que sigue durmiendo en la calle lo hace por su voluntad, no por necesidad, porque incluso en los momentos más extremos -como en el invierno- no ha habido ni una sola solicitud que (el Ayuntamiento) no haya podido contestar".
"El problema es que ahora que hemos cumplido el objetivo social no tengo una ley que me ampare para obligar a una persona que está en la calle a desplazarse contra su voluntad", ha zanjado.