vitoria. Al enfrentarse al capítulo de la violencia ejercida sobre las mujeres dentro del territorio, la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Álava se confiesa alarmada por la aparición cada vez más cotidiana de procedimientos en los que el sujeto activo "es joven e, incluso, menor de edad". Una circunstancia que lleva al fiscal jefe, Josu Izaguirre, a señalar que la esperanza depositada en que el paso del tiempo y el cambio en los modelos educativos trajera una paulatina disminución de este tipo de delitos, simplemente "no se corresponde con la realidad".

El nuevo modelo de agresor pone de manifiesto, a juicio de la Fiscalía que "se trata de personas educadas en la idea de que todo se puede alcanzar inmediatamente y de que la voluntad propia se puede imponer sobre las demás". Este perfil se conjuga con "un bajo umbral de capacidad de frustración que da lugar a reacciones violentas cuando la persona con la que mantiene una relación decide acabar con la misma". Chavales despechados que no dudan en recurrir a la violencia cuando su pareja les abandona.

A lo largo de 2009 se registró un incremento "moderado" en el número de las causas tramitadas por delitos de violencia de género. Un 4,73% más que en 2008 que, de acuerdo con la interpretación que de la estadística realiza Izaguirre, "mantiene la tendencia al incremento, lo cual es preocupante". Según su criterio, no es posible atribuir esta evolución al alza, como en el caso de los delitos contra la propiedad, "a situaciones coyunturales como, por ejemplo, la crisis económica, en la esperanza de que cuando dicha situación desaparezca o mejore se produzca una disminución correlativa en el número de delitos". Al analizar pormenorizadamente los casos, la Fiscalía concluye que al producirse agresiones no existe diferencia en la naturaleza de la relación de pareja. "Al contrario, incluso se detecta un mayor índice entre parejas de hecho o que lo fueron", apunta la memoria anual.

En cuanto a la mejora de la respuesta penal ante este fenómeno, los fiscales se felicitan porque ésta mejoró espectacularmente a lo largo de 2009. Así, el número de diligencias urgentes aumentó en un 117,72% durante el año pasado.