vitoria. Una mujer tuvo que ser atendida el pasado domingo por inhalación de humo y por quemaduras en sus brazos y manos después de que se produjera un incendio en su domicilio de la capital alavesa. Según informaron ayer los rectores del retén de Bomberos de la urbe gasteiztarra, el incendio se declaró minutos antes de las 13.30 horas en el portal número tres de la calle José Pablo Ullíbarri, en pleno corazón del barrio de Aranbizkarra.

El fuego se inició en una de las habitaciones de la vivienda, donde resultaron totalmente calcinados todos los enseres del dormitorio. Como la puerta de ese habitáculo se encontraba abierta, el calor y el humo se propagaron rápidamente por toda la vivienda, lo que produjo importantes años en otras habitaciones. El calor provocó la caída de gran parte del falso techo del pasillo y el humo ennegreció la totalidad de la casa y las escaleras del inmueble.

La virulencia del incendio provocó momentos de confusión entre los vecinos del edificio, a alguno de los cuales se les tuvo que tratar con oxígeno por parte de los servicios sanitarios desplazados al lugar.

El incendio de ayer es el mayor importancia tras el sufrido el pasado mes de octubre en la localidad de Navaridas. Entonces, la casa de un vecino apareció de repente envuelta en llamas y nadie pudo hacer nada para tratar de rescatar al único morador, que falleció. Poco después de las dos de la tarde una persona apreció que salían llamas y humo en un domicilio de la avenida Diputación de la localidad alavesa. La vivienda pertenecía a Antonio Mazuelo, un hombre de 82 años, que vivía solo en el edificio de tres plantas y del que no había rastro en ese momento.