- La CUP no solo se plantea pedir la presidencia del Parlament, como así se lo ha trasladado a su militancia en un documento, sino que será una de sus exigencias a ERC para investir a Pere Aragonès. Esta apuesta por comandar la segunda institución más importante de Catalunya pasa incluso por delante de entrar en el Govern y apunta a ser una condición sine qua non, según adelantó ayer en su página web el diario Ara. Es más, los anticapitalistas ya habrían puesto dos nombres sobre la mesa para encabezar la Cámara: la cabeza de lista las pasadas elecciones, Dolors Sabater, o el número 2 de la candidatura, Carles Riera.
Los republicanos han alimentado el debate no asegurando la presidencia a JxCat e incluso ayer mismo dejaron la puerta abierta a la CUP.El presidente de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, así lo corroboró: “Si lo plantean, dispuestos a hablar de todo siempre”, dijo en Ser Catalunya. “En caso de que tengan otras aspiraciones diferentes en el ámbito parlamentario, que se pongan sobre la mesa porque estamos dispuestos a hablar de todo”, añadió.
“A pesar de los recelos que puedan tener ERC y JxCat, hay que batallar para presidir el Parlament porque es donde pueden salir iniciativas de ruptura y nosotros no tenemos miedo de asumir las responsabilidades que se deriven”, subrayan desde los sectores anticapitalistas. Y es que en el nuevo embate con el Estado que defiende y que debe culminar con un nuevo referéndum antes de 2025, la CUP aboga por superar el marco legislativo estatal desplegando las leyes sociales suspendidas por el Constitucional o aprobando otras nuevas para defender la soberanía del Parlament y, de paso, volver a movilizar la calle en caso de que se impugnen.
En este contexto, y en su segunda reunión negociadora, la CUP trasladó ayer a JxCat sus críticas al Departamento de Interior por “la represión contra las movilizaciones” y, en el marco de las negociaciones para la formación del nuevo Govern, preconiza dar “un giro de 180 grados” en las políticas de orden público.