- La candidata de EH Bildu a lehendakari, Maddalen Iriarte, advirtió ayer al jefe del Ejecutivo vasco, Iñigo Urkullu, de que "ante el fascismo no vale ser equidistante", y defendió el voto a la coalición soberanista como método para "parar al fascismo y sus mentiras".
Iriarte, que tomó parte en un acto político en Lekeitio, se refería así a las palabras de Urkullu tras la agresión sufrida por la diputada de Vox Rocío De Meer durante un mitin celebrado el vienes en Sestao. Lo sucedido en la localidad de Ezkerraldea fue el punto y seguido a los incidentes registrados en Bilbao y Donostia en la comparecencia de Ortega Smith. Tras los hechos de Sestao, el lehendakari condenó la agresión a De Meer y denunció "esta dinámica de retroalimentación sospechosa". "Quienes hoy han agredido a la diputada de Vox en el acto de Sestao y quienes interfieren los actos de cualquier formación política y/o acosan a personas y partidos que representan opciones diferentes no están legitimados para exigir ni reivindicar nada", aseguró.
En este sentido, Iriarte expresó su sorpresa ante "la equidistancia de Urkullu entre el fascismo y el antifascismo" y alertó de que "en este país tampoco estamos a salvo del auge del fascismo", por lo que "no podemos despistarnos y hay cosas que debemos tener claras como país". Hay que señalar que desde la prensa de la derecha se acusó ayer también a Urkullu de "equidistancia", en este caso al considerar que su actitud es permisiva con quienes protestaron por la presencia de Vox.
La candidata a lehendakari aseguró que EH Bildu es la receta ante "ese fascismo que pone en peligro todos nuestros derechos como pueblo". "Solo con una EH Bildu fuerte podremos conseguir para este país las herramientas soberanas que necesitamos para avanzar como pueblo y para construir una sociedad fundamentada en la justicia social", argumentó.
Además, Iriarte opinó que en ese camino ni el PNV ni Urkullu "son de fiar, tal y como ellos mismos se han encargado de dejar claro en estos últimos años". Así, afirmó que en 2012 Urkullu prometió una consulta sobre el nuevo estatus, pero "se le olvidó en el camino". "Luego llegaron las autonómicas de 2016 y entonces prometió un nuevo estatus con derecho a decidir, pero cuando llegamos a un acuerdo histórico entre EH Bildu y PNV para un nuevo estatus fundamentado en una relación de igual a igual con el Estado español, fue el propio Urkullu el que tiró el acuerdo por la borda porque no le gustaba, porque nunca le ha gustado, porque no tiene palabra", acusó.
En el acto también tomó parte la cabeza de lista de EH Bildu por Bizkaia, Jasone Agirre, quien se refirió al drama vivido en las residencias de mayores durante la pandemia. A su juicio, ha sacado a la luz la verdadera realidad que se esconde tras el discurso del PNV. "Los que hablan hoy de confianza y responsabilidad han mercantilizado las residencias, las han dejado en manos de los mercados", señaló Agirre, quien auguró "recortes también en las residencias si sigue gobernando el PNV".