barcelona - Aunque el exconseller de Interior, Jordi Jané, admitió tímidamente que una de las circunstancias que motivaron su salida del Govern presidido por Carles Puigdemont en julio de 2017 fue la posibilidad de que “en el futuro pudiera no darse un consenso de acuerdo” respecto a la consecución de una solución pactada al conflicto político en Catalunya; respondió con un rotundo “no” a la pregunta directa de si su cese el 14 de julio de ese año tuvo algo que ver con la celebración del referéndum del 1-O. En su testifical en el Tribunal Supremo, Jané consideró que “hubo un cúmulo de circunstancias” entre las que citó la enorme entrega que exigía el cargo, la celebración el 10 de julio de la Junta de Seguridad en Catalunya -empeño personal cumplido- y la dimisión del consejero Jordi Baiget, que “abrió una posibilidad de cambio en el Gobierno”.
Hasta ese momento siempre se defendió en el seno del Govern “la vía del acuerdo para encontrar una solución pactada”, a lo que se une que él, personalmente, siempre había defendido, y lo sigue haciendo, “la necesidad del diálogo y el acuerdo para encontrar soluciones”. Ante la insistencia del letrado de Vox, el exconseller subrayó: “No hubo cambio de criterio” ese verano en el Govern, “hubo la salida de un consejero, la sensación de que podía producirse cambio de Gobierno y vi oportuno plantear mi voluntad de no continuar en el mismo”.
Preguntado si hasta la fecha de su dimisión se había planteado qué papel podrían a jugar los Mossos en un referéndum , Jané incidió en que durante su mandato en Interior el papel de los agentes siempre fue el mismo: cumplir la ley y hacerla cumplir siempre y preservar la seguridad de la ciudadanía. “¿Trasladó esta idea al resto del Gobierno?”, insistió el abogado, a lo que Jané replicó que en todo momento tanto Puigdemont como Oriol Junqueras “siempre respetaron que el cuerpo de Mossos está para cumplir la ley y hacerla cumplir”.
En su turno, el fiscal Jaime Moreno se interesó por conocer si Jané fue cesado o dimitió, a lo que el exmandatario respondió que el cese fue por su decisión de “no continuar”. Especialmente incisiva fue la abogada del Estado, Rosa María Seoane, que cuestionó al testigo sobre si consideraba que la presentación de la pregunta y fecha para el referéndum el 9 de junio, o la del borrador de la Ley de Referéndum del 4 de julio hacían albergar expectativas de una solución pactada. Jané le contestó que “a veces se hacen presentaciones sin valor jurídico en el marco de una búsqueda de futuros acuerdos”. - E.P.