barcelona - El abogado belga de Carles Puigdemont, Paul Bekaert, reveló ayer que la Fiscalía española retiró la orden de detención europea contra el president de la Generalitat cesado tras los “contactos” que mantuvieron las fiscalías de ambos países y, entonces, comprendió que perdería el caso.

En una entrevista en La Directa recogida por Europa Press, el letrado belga de Puigdemont (en España le representa legalmente Jaume Alonso Cuevillas) aseguró que la Fiscalía belga convenció a la española de que el president destituido y los consellers cesados que también están en Bruselas serían considerados impunes, por lo que los tribunales belgas rechazarían su extradición. “Una vez entendido que perderían el caso, la Fiscalía española decidió retirar la orden de detención europea”, aseguró Bekaert, pese a destacar que la Fiscalía belga apoyaba la extradición, sobre todo para mantener la amistad con la española, y se esforzó para persuadir al tribunal belga de que se llevara a cabo.

Sobre si Puigdemont y los consellers podrán volver a Catalunya, dejó claro que solo podrán hacerlo si se retira la orden de detención en España, y constató que, según la Constitución belga, no se puede sancionar a un cargo público por todo lo que hace en el ejercicio de su función.

Así, argumentó que si el Parlamento flamenco hubiera organizado un referéndum sobre la independencia de Flandes, y la hubiera proclamado y ejecutado, “ni con todos los esfuerzos del mundo podrían poner a los ministros en la cárcel, esto es imposible”. A su juicio, “lo máximo que se podría hacer es ir al Tribunal Constitucional y anular la decisión por inconstitucional. Es lo que España hizo a través de la retirada de la autonomía con el 155, pero no se puede castigar al president y a los consellers personalmente”, apuntó.

Al preguntársele por la separación de poderes en España, el letrado afirmó que quiere creer que el Gobierno español no ordenó a los jueces la detención de los políticos catalanes, destacando que formalmente no lo puede hacer pero “de forma informal, nunca se sabrá si pasó”. Abundando en este argumento, Bekaert dijo que “la detención de ex consellers catalanes por motivos políticos no es precisamente una muestra de imparcialidad”.

Para Bekaert, durante el franquismo existía una mentalidad anticatalana que ha resucitado recientemente: “Cuando se trata de vascos y catalanes, el Estado pierde toda la racionalidad. Cuando se trata de la unidad de España, Franco sigue vivo”.

En relación a la reacción de Europa, ve evidente que el Partido Popular Europeo (PPE) frenó la condena de la Comisión Europea a España porque “el interés partidista del PPE y su mayoría en el Parlamento Europeo están por encima de la democracia”, y aseguró que Europa no pondrá problemas al Estado y dejará que el problema se desangre. -DNA