El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, inició ayer su periodo vacacional, que pasará en su mayor parte en Galicia, pero no por ello dejará de seguir los asuntos de la actualidad. Muy al contrario, aseguró que estará “atento todos los días a los acontecimientos que se puedan producir” especialmente en Catalunya, que afronta la fase decisiva de cara al referéndum del 1 de octubre. Es más, Rajoy adelantó que, si la Mesa del Parlament admite a trámite el día 16 la proposición de ley para la celebración del referéndum -lo que sería la antesala de su aprobación por el Pleno el 6 de septiembre-, convocará de forma extraordinaria al Consejo de Ministros ese mismo día para cortar de raíz la pretensión de las formaciones soberanistas.
El líder del PP realizó estas declaraciones en el marco de su habitual paseo vacacional en la orilla del río Umia en Ribadumia (Pontevedra). Su periodo estival se prolongará hasta el día 20 visitando las cuatro provincias gallegas, con la sola excepción del viaje que hará a Palma de Mallorca el día 7 para su tradicional despacho de verano con el rey. No obstante, a mediados de mes podría tener que volver a ponerse el traje de faena, en función de las acciones que tome la Mesa del Legislativo catalán. En declaraciones a los medios, Rajoy calificó de “positiva” la actuación del Tribunal Constitucional, que el pasado lunes suspendió la reforma del reglamento del Parlament para la aprobación por la vía rápida de la Ley del Referéndum, registrada el mismo lunes.
El presidente español recordó que el TC ha dicho que “en absoluto se podía aprobar en 24 horas, como pedía el Parlamento de Cataluña, una ley convocando un referéndum. Eso es un disparate y se ha declarado anticonstitucional”, señaló. Insistió en que su Gobierno “seguirá defendiendo la democracia y la ley, las normas que nos obligan a todos, a los gobernantes y a los ciudadanos”, y recordó que la Mesa del Parlament no puede sacar adelante las leyes de desconexión porque así lo ha dicho el alto tribunal. “Si lo hacen y violasen la ley, estaríamos en otro escenario”, advirtió.
Agenda propia El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ironizó con el plan expuesto por Rajoy de convocar de urgencia a su gabinete y dijo: “Respeto la vocación de trabajo del Consejo de Ministros, ojalá siempre fuera así”. En un chat de la aplicación móvil Zonetacts, en el que intercambió varios mensajes con los usuarios, subrayó que el Govern tiene su propia agenda “al margen de lo que decida hacer” el Ejecutivo español. Así, insistió en que el 1-O “habrá colegios electorales abiertos y nada podrá impedir que abran con normalidad. El trabajo del Govern es garantizarlo” e incentivar que las urnas “se llenen”, ya que la participación hará vinculante el referéndum.
En el transcurso del chat también puso en duda que “en democracia se pueda inhabilitar a alguien por cumplir con lo aprobado por el Parlament”. En cuanto a los apoyos internacionales a una hipotética Catalu-nya independiente, el president dijo que “nos los tenemos que ganar y la mejor manera es enviar un mensaje claro el 1 de octubre”. Destacó asimismo que no trabaja en realizar una declaración unilateral de independencia, sino en celebrar un referéndum, que es “la mejor declaración que puede hacer el país”.
En respuesta a otro ciudadano, Puigdemont opinó que, de consumarse la independencia, las relaciones con España deberían ser “siempre las mejores, en beneficio mutuo”, aunque añadió que “la democracia española es mejorable”, ya que “la separación de poderes no es evidente” y existe una “guerra sucia desde el aparato del Estado”.