BILBAO. Asimismo, ha afirmado que desea que su marcha ayude a facilitar "el acercamiento" dentro de EB, aunque ha reconocido que no es "optimista" al respecto.
Madrazo ha realizado este anuncio en un texto publicado en su blog personal desde Huelva, donde se encuentra de vacaciones, en el que ha lamentado que se haya profundizado "aún más en la división interna" de Ezker Batua debido a "los sucesos ocurridos en Araba", después de que el jeltzale Xabier Agirre anunciara durante el pleno de investidura del nuevo diputado general de Araba que EB había reclamado al PNV que "colocara" a 39 afiliados de esa formación a cambio de respaldar su candidatura.
No obstante, ha opinado que EB "ya era una organización rota desde un año atrás". En cualquier caso, ha manifestado su "tristeza no sólo por lo que está ocurriendo, sino además, y sobre todo, porque veo que la formación política en la que milito desde 1986 no ha logrado mantener la unidad deseada, ni superar los baches y las dificultades a las que se ha tenido que enfrentar".
Madrazo ha explicado que, en diversas ocasiones, ha pensado en formalizar su baja como militante para "pasar página a la leyenda sobre madracistas, refiriéndose a una de las sensibilidades que hasta ahora han convivido en Ezker Batua-Berdeak", pero no lo ha hecho porque "siempre me ha costado imaginarme fuera de esta organización, que ha sido una segunda casa tanto cuando he sido militante de base como cuando he tenido cargos de responsabilidad".
CERRAR ESTE CICLO
Sin embargo, ha afirmado que "ha llegado el momento de cerrar también este ciclo" y, por ello, en los próximos días solicitará su baja en Ezker Batua-Berdeak. Con esta decisión, ha asegurado, le gustaría ayudar "de algún modo" a facilitar "un acercamiento entre todas las personas que continúen en la organización", si bien ha reconocido que no es "optimista".
"Ojalá me equivoque y Ezker Batua-Berdeak sea noticia en un futuro próximo por haber sido capaz de cicatrizar sus heridas y no sólo por airear sus diferencias", ha manifestado.
El ex coordinador de EB ha reconocido que se va "con dolor" y ha subrayado "quienes quieren imputarme responsabilidades en lo ocurrido en Alava no tienen ninguna razón para hacerlo". "Y lamento que se escuden en este hecho para legitimar la ruptura de Ezker Batua-Berdeak", ha agregado.
A su entender, deberían ser "más responsables" y pensar que "la división debilita a la izquierda en su conjunto y a las personas que todavía confían en ella".