Los socialistas reclaman su vasquismo para hacer frente al PNV en los comicios

López defendió la longevidad del socialismo en Euskadi como contrapeso a las acusaciones de ilegitimidad que el nacionalismo ha lanzado contra el pacto PSE-PP. Tras desgranar la historia de su partido en Euskadi, desde que nació en las minas de La Arboleda hasta su llegada a Ajuria Enea, y pasando por la gestación de los dos estatutos vascos, el del 36 y el del 79, López trató de neutralizar el mensaje del PNV, con quien por otra parte los socialistas han pactado desde los albores del siglo XX, tal y como recordó. "Con esta historia, quién nos puede decir que somos extraños en esta tierra, quién nos puede decir que somos usurpadores", proclamó López.

Lo suele decir el PNV, partido sobre el que el secretario general del PSE quiso desmontar varios "mitos". Afirmó el lehendakari que los socialistas vascos fueron los precursores del cooperativismo, seña de identidad vasca en el ámbito empresarial internacional, y recordó a "los batallones de milicianos socialistas que defendieron la libertad de esta tierra". Reivindicó, además, entre aplausos, al primer lehendakari de la democracia, Ramón Rubial, "aunque algunos no lo quieran reconocer", y terminó rememorando los gobiernos de coalición entre socialistas y jeltzales de los noventa.

López presentó como aval para pedir el voto ciudadano la puesta en marcha de Osakidetza, el modelo escolar vigente o la implantación del metro en Bilbao, y pasó a repasar su propia gestión. El lehendakari trató de incidir en la idea de que el Gobierno del PSE es un buen gestor, que dialoga con los agentes sociales y que evita la confrontación, afirmó que bajo su mandato Euskadi ha entrado en crecimiento positivo y el paro ha dejado de aumentar, y entró a repasar todas las iniciativas del Ejecutivo para contrarrestar las críticas de inacción de las que le acusa la oposición. La escuela trilingüe y el programa Eskola 2.0, la inversión sanitaria en pacientes crónicos, la alta velocidad, el alza del turismo o la web Irekia fueron los activos que López presentó frente a unos gobiernos nacionalistas que, a su juicio, han hecho "llegar diez años tarde" a los socialistas a muchos "retos".

Por último, el lehendakari afirmó que "ya no habrá Gobierno futuro capaz de desandar el camino", aunque por si acaso advirtió de que su proyecto "va más allá de 2013".

Era el de ayer un acto de marcado carácter electoral. Ese ambiente de precampaña se vio reforzado con la presencia de Rubalcaba, el hombre al que los propios socialistas apuntan como candidato socialista a La Moncloa. El de Solares, que se definió como "un modesto socialista vasco" tras ser considerado por López como uno más en el PSE, dirigió su mensaje a un ámbito más estatal, atacando a "la derecha" y recordando que "hoy tenemos un lehendakari socialista en Ajuria Enea y un presidente socialista en La Moncloa".

Del también ministro de Interior llegaron las escasísimas e implícitas referencias que hubo en la celebración de ayer a ETA. "Habéis conseguido el derecho a vivir con normalidad y a que nadie se apropie del amor a esta tierra", dijo Rubalcaba, quien atribuyó a los socialistas vascos buena parte del mérito de que "más pronto que tarde sea sólo un recuerdo el que a la democracia se le ataque con pistolas".

convención en zaragoza Por otro lado, el lehendakari participará hoy en Zaragoza en la Convención Autonómica Socialista que el PSOE va a celebrar en la capital aragonesa, según informa Europa Press. La convención se va a celebrar en el Auditorio del Palacio de Congresos de Zaragoza y López tomará parte como ponente de una mesa redonda que se celebrará a partir de las 16.30 horas bajo el título Los Gobiernos autonómicos, responsables de la prestación de servicios públicos de calidad.