bilbao. Los mediadores internacionales tienen previsto establecer "algún tipo de comunicación" con ETA después del comunicado del pasado domingo, según fuentes conocedoras del proceso. Estas mismas fuentes aseguran que es el movimiento lógico en este tipo de situaciones, si bien descartan como posible escenario la celebración de una reunión física entre mediadores y miembros de la banda que dé inicio a los trabajos de mediación.

Consideran este extremo como prematuro dado que la organización armada todavía no ha dado el paso definitivo que le pidió el grupo formado por cuatro premios Nobel de la Paz y la Fundación Nelson Mandela, entre otras personalidades. Por ello, estas fuentes apuntan como método más factible el establecimiento de contactos indirectos cuyos resultados, además, serían publicitados por la banda. ETA podría aprovechar esta comunicación abierta en el marco de su estrategia de recuperar el protagonismo y sacar el máximo partido a su objetivo de internacionalizar el "conflicto".

Por parte de los mediadores, el deseo de establecer comunicación iría más bien encaminado a conocer las intenciones reales de la banda de primera mano después del último comunicado que, pese a su extensión, no está exento de interrogantes. Una de ellas es la tardanza que ha tenido ETA en dar respuesta a estos mediadores. La Declaración de Bruselas se produjo el 29 de marzo, hace ya casi seis meses en los que la banda ha emitido hasta tres comunicados sin haber dado muestras estar dispuesta a aceptar las bases propuestas en aquel llamamiento.

Todavía no han trascendido los nombres de los posibles candidatos que podrían presentarse para encabezar la interlocución con ETA, si bien el perfil atendería a personalidades de "prestigio y moral intachable" o "expertos en resolución de conflictos", indicaron las fuentes consultadas que también apuntaron a la necesidad de que una posible comisión mediadora contase también con algún representante español.

ofrecimiento El que no ha tenido problemas en ofrecerse como mediador ha sido el ex presidente sudafricano Frederik Willem de Klerk, que está dispuesto a analizar "cuidadosamente" cualquier petición para hacer de interlocutor entre la banda y el Gobierno español, según indicó ayer su portavoz. "Hasta donde yo sé, De Klerk aún no ha recibido ningún acercamiento formal para actuar como mediador. Él no analizará ningún papel sin recibir una invitación y sin el apoyo de todas las partes", aseveró su portavoz.