circulará estos días por los hogares de los viejos una carta remitida por la ministra Fátima Báñez en la que comunica el aumento de las pensiones a la vez que loa la gestión de su Gobierno, que no hace sino incrementar año tras año -no como otros- la cuantía (media docena de euros al año o así) a percibir por jubilados y pensionistas. No es que sea adivino, es que uno tiene madre y la arenga se repite año tras año desde hace cinco, desde que el PP arribó al poder y decretó una subida anual del 0,25% que dijo iba a ser como mínimo y, a la vista de los hechos, ya se está consolidando como un máximo insuperable. O mintieron entonces cuando achacaban la medida a la crisis o mienten ahora que presumen de que la economía española va viento en popa. En todo caso mienten, claro, de la misma manera que cuando la propia Fátima lanzó el otro día que los futuros jubilados iban a poder elegir los años de cotización a tener en cuenta para que la pensión resultara más favorable a sus intereses. ¡Ja! Circula también estos días por las redes sociales una chirigota en la que los cantantes culpan de la precariedad actual y futura a sus abuelos por votar y consolidar en el poder a los rebañadores de derechos, tanto sociales como laborales. “Decías que me querías. ¿Cómo has podido hacerme esto?”
