Capítulo 3.278.589: tras el relevo de tres consellers, entre ellos el de Interior, dimite/cesa -hay versiones para todos los gustos- el director de los Mossos d’Esquadra y 24 horas después, el director del 112. Como le dice Cersei a Ned Stark, en el juego de tronos o ganas o mueres, y parece que en ello están. Narrativamente, se diría que el serial del conflicto entre el Estado y Catalunya ha llegado a uno de sus puntos álgidos que marcan el final de una temporada para dejar muchos anzuelos a la audiencia que la mantengan expectante hasta la siguiente. Y esta trama in crescendo, centrada en este momento en tierras catalanas y en un proceso de purga o de cerrar filas en el Govern en torno al referéndum unilateral del 1 de octubre -todo depende de quién lo califique- ¿no podría ser una especie de traslación soft a la política -incruenta al menos- de la Boda Roja? Porque no me negarán que en pleno furor mundial por el estreno de la séptima temporada de Juego de tronos, con su vertiente vasca incluida, es tentadora la referencia. De hecho, con el historial de dragones que atesora Catalunya, y hablo de Sant Jordi claro, imagino a los fieles a las avatares de los Lannister & cía. y además aficionados a la cosa política buscando a quién encaramar el papel de Daenerys, por ejemplo. Winter is coming... O el referéndum...
