El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha anunciado este miércoles que planea la construcción de otras mil viviendas en el asentamiento de Eli, situado en Cisjordania, en respuesta al ataque perpetrado el martes en la zona, que se saldó con la muerte de cuatro israelíes.

"Nuestra respuesta al terrorismo es golpear duro y construir nuestro país", ha dicho la oficina de Netanyahu en un breve mensaje en su cuenta en la red social Twitter, antes de afirmar que el acuerdo ha sido alcanzado durante una reunión con el ministro de Finanzas, el ultraderechista Bezalel Smotrich.

Acción- reacción

El ataque en Eli, achacado por Israel a dos miembros del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) identificados como Muhanad Falé Shehadé y Jaled Mustafá Sabá, ambos muertos durante o después del atentado, tuvo lugar un día después de una redada israelí en Yenín que ha dejado al menos siete palestinos muertos y más de 90 heridos.

El aumento de las tensiones durante los últimos meses se ha saldado con la muerte de alrededor de 175 palestinos y 25 israelíes, mientras se teme que pueda haber un estallido generalizado de violencia.

Operación a gran escala

Netanyahu dijo el martes que "todas las opciones están abiertas", en medio de los llamamientos en el seno de la coalición gubernamental para una operación a gran escala en Cisjordania.

El anuncio de Netanyahu llega además días después de que el Gobierno de Israel aprobara acortar y simplificar los procedimientos para la aprobación de la construcción de nuevos asentamientos en Cisjordania, lo que ha desatado críticas por parte de Naciones Unidas y otros organismos y gobiernos internacionales.

Rechazo internacional

El coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en Oriente Próximo, Tor Wennesland, alertó el lunes de que la decisión podría "acelerar la expansión de los asentamientos" y sostuvo que "el establecimiento de asentamientos por parte de Israel en los territorios palestinos ocupados desde 1967, incluido Jerusalén Este, no tiene validez legal y constituye una violación flagrante del Derecho Internacional".