- Un ataque ruso contra la planta química de la ciudad de Avdiivka, en la provincia oriental de Donetsk, dejó ayer por lo menos diez muertos y 15 heridos, según anunció el jefe de la administración militar de la región, Pavlo Kyrylenko. Se trata de una cifra “operativa,“ destacó, en un mensaje en su cuenta de Telegram, y agregó que todavía están llegando informaciones y que es posible que el número de víctimas “sea más elevado”.

Kyrylenko señaló que los muertos y heridos son trabajadores de la planta, que produce coque y una gran variedad de productos, como alquitrán de hulla, gas de coque o sulfato de amonio. “Los rusos sabían exactamente a qué le estaban apuntando. Los trabajadores acababan de terminar su turno y estaban esperando el autobús para volver a casa desde la factoría,“ denunció el jefe de la administración militar de Donetsk.

No detalló sin embargo si las infraestructuras de la planta, que ya sufrió daños por fuego de artillería ruso el pasado 13 de marzo, habían resultado dañadas en el ataque.

Kyrylenko anunció que una zona residencial en el centro de Avdiivka fue bombardeada este martes por aviones rusos, lo que causó tres muertos y dos heridos y dañó ocho viviendas y afirmó que por lo menos otros seis civiles murieron por otros ataques en la región. Rusia anunció el pasado 19 de abril la entrada en una segunda fase de la guerra, centrada en la “liberación completa” del Donbás, región a la que pertenecen las provincias de Donetsk y Lugansk, controladas en parte por separatistas prorrusos.

Mientras, las autoridades ucranianas se muestran cada vez más confiadas en que con la ayuda militar occidental, en particular con el armamento pesado que ha comenzado a recibir el Ejército ucraniano, conseguirá dar un vuelco a la guerra.

“Esto se notará en las próximas semanas, cuando empecemos a utilizar los obuses que nos está suministrando Estados Unidos, que son más precisos y tienen mayor alcance que los anticuados que emplea el Ejército ruso”, afirmó Oleksii Arestóvich, asesor militar de la Presidencia ucraniana.

En su opinión, la superioridad cualitativa en artillería compensará la superioridad que mantiene Rusia en el aire.

Coincidió con el asesor presidencial, el jefe de la administración militar ucraniana de región de Lugansk, Serguéi Gaidái. “Todo comenzará a cambiar en un par de semanas. Desde luego, aumentarán los combates. Pero las decisiones de Occidente de ayudarnos se materializarán en no más de dos semanas, y entonces veremos los cambios”, dijo Gaidái.

TLos suministros de armamento occidental a Ucrania preocupan claramente a Rusia que ve al ejército cada vez mejor pertrechado.

De hecho, Vladímir Putin se quejó ayer ante su homólogo francés, Emmanuel Macron, que la Unión Europea hace caso omiso a “los crímenes de guerra que cometen los militares ucranianos, a los bombardeos masivos de ciudades y pueblos del Donbás”.

Según el jefe del Kremlin, Occidente podría ayudar a poner fin a estos crímenes “influyendo de la debida manera en las autoridades de Kiev y cesando el suministro de armamentos a Ucrania”.

Once periodistas muertos. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, arremetió ayer contra el mandatario ruso, Vladímir Putin, por la muerte de once periodistas en la guerra de Ucrania y por tratar de “silenciar” a quienes quieren contar la verdad sobre este conflicto. Con motivo del Día Mundial de la Libertad de Prensa, Biden lamentó estos fallecimientos y las heridas que han sufrido al menos otros once informadores desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania.