- El secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Ghali, insistió en que Marruecos “declaró la guerra al violar los acuerdos militares” entrando en el paso de Guerguerat, zona desmilitarizada que separa Mauritania del Sahara Occidental.
Instó a la comunidad internacional “a actuar” para que la posición de la ONU “deje de fluctuar” y poder evitar así una escalada de “la guerra”, en su primeras declaraciones desde que el viernes se produjera el incidente armado en la frontera que ha desatado la tensión bélica en la región.
Desde entonces, los saharauis aseguran que han lanzado cuatro ataques contra posiciones militares marroquíes en el muro de separación en el desierto y causado “bajas mortales al enemigo”, una afirmación que niega Rabat, que también minimiza los bombardeos.
“Los saharauis no querían un derramamiento de sangre, pero Marruecos nos lo impuso. El régimen marroquí es arrogante y debe pagar el precio, porque la guerra fue declarada por la ocupación marroquí violando los acuerdos de paz”, afirmó Ghali en declaraciones difundidas por la agencia oficial de noticias saharaui SPA.
El responsable, que fue ministro de Defensa entre 1976 y 1989, años durante los que se desarrollo la guerra tanto con Mauritania como con Marruecos, subrayó, que “la resistencia armada del pueblo saharaui es el único idioma que entiende el colonialismo marroquí”, y que, por ello, “el pueblo saharaui está en guerra y continuará su lucha hasta el día de la victoria”.
Al hilo de este argumento, Ghali, que alabó la postura de Argelia en el conflicto saharaui, instó a la comunidad internacional “a actuar para que la posición de la ONU abandone la tendencia actual”, que su opinión ha comenzado a fluctuar en favor de Marruecos, que se niega a aceptar los términos del acuerdo de paz firmados con el Frente Polisario en 1991.
Según aquel pacto, auspiciado por la ONU, ambos contendientes aceptaban la celebración de un referéndum de autodeterminación.
En 2019, Rabat anunció que no estaba dispuesto a conceder la autodeterminación y que como mucho se abría a negociar un acuerdo de autonomía.
Ghali respondía así al rey de Marruecos, Mohamad VI, quien el lunes en su primera reacción al conflicto volvió a dejar entrever que considera la anexión del Sahara Occidental como un hecho consumado.
En una conversación con el secretario general de la ONU, Antonio Gutierres, el monarca insistió en que el proceso político deberá “implicar a las verdaderas partes en este conflicto regional (en alusión a Argelia) y permitir una solución realista y realizable en el marco de la soberanía del Reino”, es decir, con exclusión de la autodeterminación.
La izquierda española exige mediación del Gobierno. Diversos partidos, entre ellos, Más País, Compromís y la CUP, han emplazado al Gobierno que medie entre Marruecos y el Frente Polisario, en lugar de “lavarse las manos”, y asuma su responsabilidad histórica como antigua colonia española para frenar el conflicto.
Es lo que asegura el representante del Frente Polisario para España. Un conflicto que, denuncia, “nadie tiene interés en resolver”.