Managua - La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha denunciado que varias de las muertes producidas en las protestas antigubernamentales en Nicaragua podrían equivaler a “asesinatos no justificados”.

“Hemos recibido informaciones de al menos 25 muertos en el marco de las protestas en Nicaragua. Estamos particularmente preocupados por que un número de estas muertes podrían definirse como asesinatos no justificados”, aseguró la portavoz de la Oficina Elizabeth Throssell, que pidió a las autoridades nicaragüenses una investigación rápida, profunda, independiente y transparente de estas muertes. “Es esencial que todas las alegaciones de uso excesivo de la fuerza por las fuerzas policiales y otros cuerpos de seguridad sean investigadas efectivamente y que todos los responsables asuman sus responsabilidades”, dijo en la rueda de prensa de la ONU en Ginebra.

Throssell afirmó también que estaban “muy preocupados” por las informaciones de que “docenas de personas han resultado o han sido detenidas” durante los últimos días. Asimismo, la portavoz dijo que se deberían investigar los casos de pillajes, y recordó que, a pesar de que la reforma de la seguridad social que hizo estallar el conflicto ha sido derogada, se esperan más manifestaciones en los próximos días.

La gran Marcha Miles de personas en las calles de Nicaragua pidieron el lunes al Gobierno de Daniel Ortega que deje en paz a los estudiantes que desde hace seis días protestan y han sido reprimidos, según ellos, para evitar escuchar sus demandas. La manifestación pacífica e histórica en Nicaragua, que abarcó unos 7 kilómetros de calles de forma ininterrumpida, algo no visto en las últimas décadas, sirvió para que muchas personas expresaran todas sus quejas y descontentos contra el actual jefe de Gobierno y su esposa, Rosario Murillo. “Es una oportunidad para nosotros para poder salir adelante, ya estamos hartos de esto. No queremos más dictadura ¡Nicaragua libre!”, clamaba un participante en la marcha.

Tras la resaca de protestas, Nicaragua vivía ayer un ambiente enrarecido, con calles que amanecieron inusualmente vacías y comerciantes calculando pérdidas por los saqueos del fin de semana.

Por el contrario, en zonas del Pacífico, el centro y el sur de Nicaragua, las manifestaciones continuaban ayer desde primera hora, incluso en la paradisiaca isla de Ometepe, uno de los destinos preferidos por los turistas extranjeros .- Efe