el Cairo - El grupo terrorista Estado Islámico (EI) se atribuyó ayer el atentado cometido el viernes contra la minoría copta de Egipto, 29 de cuyos miembros fueron asesinados y otros 13 heridos -según las autoridades- tras ser tiroteado un autobús de peregrinos en la provincia meridional de Minia. Este ataque contra los peregrinos que se dirigían al monasterio de San Samuel es el tercero contra los cristianos coptos que el Estado Islámico se atribuye en los últimos seis meses, tras los del pasado Domingo de Ramos en las catedrales de Tanta y Alejandría, y del atentado en una iglesia de El Cairo, que causaron en total casi 80 muertos.

En un comunicado, cuya autoría no pudo ser comprobada, y difundido a través de la red social Telegram, el EI afirmó que soldados del Califato cometieron el atentado y eleva la cifra de muertos a 31. En la nota, la organización yihadista afirmó que un grupo de hombres tendió una “emboscada” a los “cruzados” mientras se dirigían al monasterio, situado en el oeste de Minia. Aseguró que al menos 24 de los cristianos resultaron heridos y que uno de los vehículos fue incendiado.

Según los últimos datos proporcionados por la Fiscalía egipcia, que cita a testigos y heridos del ataque, dos coches, en los que viajaban seis hombres enmascarados, pararon delante del autobús para bloquearle el paso. Dos de los enmascarados subieron al autobús y les robaron todas sus pertenencias a los coptos mientras les amenazaban con armas de fuego.

Después, siempre según la Fiscalía, comenzaron a dispararles dentro del vehículo, una versión que difiere de la ofrecida el pasado viernes por el Ministerio egipcio del Interior y por una fuente de seguridad, ya que aseguraron que los terroristas dispararon aleatoriamente desde sus coches, y no en el interior del autobús. Además, indicaron que el atentado lo cometieron diez hombres que se desplazaban en tres vehículos todoterreno.

Los investigadores manifestaron que encontraron otro coche quemado a 200 metros de distancia del lugar donde se perpetró el ataque y que, tras registrarlo, encontraron varias armas de fuego.

El activista y defensor de los derechos de los cristianos coptos Mina Thabet declaró que las fuerzas de seguridad egipcias no están realizando los “suficientes” esfuerzos para proteger a esta minoría, que representa el 10% del total de la población de Egipto. - I. J. Martín/ G. Emara