BERLÍN. "Hay negociaciones", subraya Kaleck, quien considera que "todos aquellos que tienen algo que ver con el caso son conscientes de que lo más sensato es buscar una solución de mutuo acuerdo".

El abogado, que no participa en las conversaciones, explica que el objetivo es buscar "al menos a medio plazo una solución que resulte aceptable para Snowden", que se encuentra en Rusia con un permiso de asilo temporal.

En una conferencia con internautas el pasado mes de enero, Snowden señaló que no contemplaba regresar a Estados Unidos mientras la ley de espionaje persiga a los denunciantes públicos, a pesar de que el Departamento de Justicia se había mostrado abierto a buscar una eventual salida al caso.

En opinión del abogado alemán del exanalista de la NSA, "sería de esperar que el Gobierno democrático de EEUU allanara el camino para Snowden".

Kaleck tampoco ve la puerta cerrada a un posible viaje del joven a Berlín, donde esta semana comenzó sus trabajos una comisión de investigación parlamentaria que debe aclarar el alcance del espionaje estadounidense en suelo alemán.

A pesar de que el Gobierno de Angela Merkel mostró en un informe su oposición a que Snowden entre en Alemania, por las implicaciones jurídicas y políticas que ello tendría, recuerda que no ha habido una negativa formal e insta a la opinión pública a defender el derecho a interrogar al exanalista en la comisión.

Las revelaciones de Snowden tensaron el año pasado las relaciones entre Alemania y Estados Unidos, al desvelar un programa masivo de espionaje y que incluso uno de los teléfonos móviles de la canciller había sido objeto de las escuchas de los servicios secretos estadounidenses.

Merkel visitó la Casa Blanca el pasado 2 de mayo y reconoció que todavía hay "algunas dificultades que superar", ante el rechazo del presidente estadounidense, Barack Obama, a acordar un tratado de no espionaje mutuo como propugna Berlín.