EL CAIRO. Los Hermanos Musulmanes de Egipto y sus aliados anunciaron ayer su intención de continuar con sus protestas contra el Gobierno, a pesar de la detención de un gran número de sus dirigentes. La denominada Alianza para el Apoyo a la Legitimidad llamó a sus seguidores a seguir manifestándose por la vuelta al poder del presidente islamista Mohamed Mursi, depuesto por el ejército el 3 de julio. La policía prosiguió entretanto su campaña contra dirigentes de los Hermanos Musulmanes. Según fuentes de seguridad, en el Alto Egipto fue detenido, entre otros, el exparlamentario Said al Saghir. Hoy comenzará en El Cairo el juicio al líder supremo de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, su número dos, Jairat al Shater y otros cuatro dirigentes de la organización islamista. Mientras, el toque de queda se retrasa dos horas, y entrará diariamente en vigor a las 21.00 horas, salvo los viernes, día habitual de las manifestaciones,.

El periódico Al Masry Al Youm informó ayer que al ser interrogado en la cárcel de Tora, Badie se negó a responder y declaró que no reconoce las instituciones de los "golpistas". Además, habría exclamado: "Ustedes han matado a mi hijo e incendiado mi casa. ¿Qué más quieren de mí?". Hoy también continuará el juicio al expresidente Hosni Mubarak. El rais, quien fue obligado a renunciar en febrero de 2011 tras prolongadas manifestaciones de protesta en El Cairo, tiene que rendir cuenta ante el tribunal por la muerte de más de 800 manifestantes. El pasado jueves, Mubarak fue excarcelado y trasladado a un hospital militar.

El primer ministro en funciones de Egipto, Hazem al Bablawy, defendió ayer la decisión de excarcelar a Mubarak. Los grupos revolucionarios que forzaron la salida de Mubarak condenaron la decisión califiándola como una "desviación de la revolución". Al Bablawy afirmó ayer que su Gobierno, apoyado por el Ejército, intenta proteger la seguridad y restaurar la seguridad en el convulso país. "Algunas posturas respecto a Egipto están cambiando lentamente, pero otros necesitan más tiempo para corregir sus ideas sobre lo que está pasando en Egipto", afirmó el jefe de Gobierno. Mientras, en la localidad de Sheij Suwaid, en el norte de la Península del Sinaí, policías y soldados se enfrascaron en un enfrentamiento con presuntos islamistas radicales que se habría saldado con la muerte de cuatro "yihadistas" y la detención de seis sospechosos. Según la televisión estatal egipcia, personas desconocidas abrieron fuego contra un puesto de control militar en la carretera que une Suez con Ismailiya. >dpa

Musulmanes durante las protetas del pasado viernes exigiendo la vuelta al poder del depuesto presidente Mohamed Mursi. Foto: AFP