La prueba de detección de alcohol y drogas es uno de los controles policiales más temidos por los jóvenes y en general por quienes han estado de fiesta y bebiendo. Tráfico incide en sus campaña en tolerancia cero respecto a este tema y contempla unas sanciones duras y la retirada de puntos el carnet al considerarse uno de los principales delitos contra la seguridad vial. La negativa a someterse a la prueba de alcoholemia, drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas se configura como un delito castigado en el Código Penal y  puede mandarte a la cárcel. Así que si tienes la tentación de rechazarla ten en cuenta que el castigo es mayor que una fuerte multa y puede suponer pena de privación de libertad.  

Este delito viene contemplado en el artículo 383 del Código Penal. Consiste en negarse a someterse a las pruebas legales para comprobar las tasas de alcoholemia o drogas, una vez que se ha sido requerido por un agente de la autoridad. La negativa a realizar se castiga pena de prisión de 6 meses a 1 año y la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores entre 1 y 4 años.

Las pruebas de detección de alcoholemia se regulan en los artículos 20 a 24 del Reglamento General de Circulación y el test se realiza verificando el aire espirado mediante un alcoholímetro oficialmente autorizado o a través de una análisis de sangre, orina u otros análogos a efectos de contraste y a petición del interesado o de la autoridad judicial. Además, también serán culpables de este delito aquellos que no soplen de manera correcta en el alcoholímetro o los que desobedezcan las instrucciones del agente para realizar adecuadamente la medición.

Los casos en los que un agente de la autoridad puede requerir las pruebas para la detección de alcohol, drogas o estupefacientes se regulan en los artículos 21 y 28 del Reglamento de Circulación. Son los siguientes: cuando un usuario de la vía o conductor esté implicado directamente como posible responsable en un accidente de circulación. Cuando un conductor presente síntomas de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas o drogas. También si un conductor es denunciado por la comisión de alguna infracción de tráfico. Y cuando se requiere a un conductor para hacerse el test en un control preventivo de alcoholemia.

Una de las penas que conlleva este delito es la pena de prisión de 6 meses a 1 año. Pues bien, cuando se condena a una pena de prisión inferior a 2 años, el juez tiene la potestad de suspender su cumplimiento si el condenado no tiene antecedentes penales. Ahora bien, para el juez no es obligatorio suspender la pena, siendo tan solo una facultad discrecional. Por lo tanto, existe la posibilidad de ir a prisión por no hacerse la prueba de alcoholemia.

Hay que tener en cuenta también que, si una persona se niega a hacerse la prueba, es muy probable que se deba a que encuentre bajo los efectos del alcohol. Entonces, si los agentes determinan esta influencia del alcohol o drogas del conductor , los hechos son constitutivos de delito y habría que sumarle a las penas por negativa a someterse a las pruebas de etilometría o drogas tóxicas las penas por conducir bajo los efectos del alcohol o drogas tóxicas, que son de 3 a 6 meses de prisión, o multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad entre 31 y 90 días, además de la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo entre 1 y 4 años.

Negarse a someterse a una segunda prueba de alcoholemia también puede ser considerado delito. El Tribunal Supremo ha venido considerando en su jurisprudencia que también se comete el delito del artículo 383 del Código Penal en caso de negarse a someterse a la segunda prueba de alcoholemia. La segunda prueba ha pasado de ser un derecho de contraste a una obligación del conductor para no incurrir en un delito de negativa.

El Tribunal Supremo ha considerado que ambos test son dos partes de una misma prueba, y que, si no se hace la segunda, dicha prueba no queda concluida y además las dos pruebas se deben de realizar en un etilómetro homologado, las pruebas en el alcoholímetro portátil de muestreo no tienen ningún valor probatorio.