El monegasco Charles Leclerc (Ferrari) saldrá primero este domingo, por delante de su compañero español Carlos Sainz, en 'su' Gran Premio, el de Mónaco, el séptimo del Mundial de Fórmula Uno. En el circuito urbano de Montecarlo; donde el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), tercero en parrilla, mejoró a su compañero neerlandés Max Verstappen, líder del mundial y último campeón del mundo; que arrancará cuarto.
Leclerc, de 24 años -que, al abandonar, le cedió el liderato del certamen el pasado domingo en Montmeló (Barcelona) a Verstappen, de igual edad, ganador ese día del Gran Premio de España y que lo supera, con 110, en seis puntos- firmó su decimocuarta 'pole' en la F1, la quinta del año: al cubrir los 3.337 metros del circuito del principado de la Costa Azul en un minuto, 11 segundos y 376 milésimas, 225 menos que Sainz. En una calificación que acabó antes de tiempo, con bandera roja, a causa de los accidentes -sin mayores consecuencias- de 'Checo' y del otro español, el doble campeón asturiano Fernando Alonso (Alpine) -que saldrá séptimo-; y en la que los Ferrari relegaron a la segunda fila a los Red Bull.
En espera de si se confirman o no las previsiones meteorológicas que anuncian probabilidades de lluvia, la 'Scuderia' -que en España perdió ambos lideratos, el de pilotos y el de constructores, en favor de Red Bull- escenificó un claro contraataque; y, después del de Miami (EEUU), copará por segunda vez la primera fila de un Gran Premio en lo que va de año. Lo hará en el más icónico y glamuroso del calendario, en las estrechas calles de Montecarlo; en la carrera más corta y en la pista más pequeña del curso; en la que, en condiciones normales, es casi imposible adelantar.
Leclerc encabezó todas las tablas de tiempos del Gran Premio salvo la del último libre; que lideró 'Checo', tercero en el Mundial, a 25 puntos de su compañero: al que superó en todo momento durante el fin de semana; antes de accidentarse en su último intento, saliendo de la curva anterior al túnel.
En esa zona le tocó también Sainz, que, con otra gran actuación, vio frustrado su último intento; al igual que Verstappen, que rodaba por detrás de ellos y evitó por los pelos una tercera colisión en el mismo lance. Antes de marcharse enojado, al verse superado por su compañero, de un circuito en el que habrá que ver si la escudería austriaca vuelve a aplicar, como hiciese el domingo pasado, unas órdenes de equipo que favorezcan al neerlandés en detrimento del mexicano. Bastante más rápido, de nuevo, este fin de semana, que su capitán.
Alonso, brillante
Casi al tiempo de este percance se produjo el de Alonso, brillante de nuevo a sus 40 años; y que lamentó haber perdido el control del Alpine en Mirabeau, la quinta de las 19 curvas de la pista, para acabar en un meritorio séptimo puesto una cronometrada en la que en la decisiva ronda llegó a ir quinto. Fernando saldrá por detrás de los ingleses Lando Norris (McLaren) y George Russell (Mercedes) -cuarto en el Mundial, con 74 puntos, nueve más que Carlos, que es quinto-. Ambos lo harán justo delante de él, desde la tercera fila.
El genial piloto asturiano, que viene de firmar la remontada en Montmeló -donde salió último y acabó noveno-, logró dos de sus 32 victorias en la F1 (las 32 que hasta la fecha cuenta España a lo largo de toda su historia) en Mónaco: en 2006, cuando revalidó título, con Renault; y al año siguiente, con McLaren. Y se marchó al hotel deseando que llueva este domingo, para intentar pescar, de nuevo, en río revuelto.
Leclerc -retirado en Montmeló, donde le cedió el liderato a Verstappen- había encabezado la tabla de tiempos el viernes, por delante de Sainz y de 'Checo', que en el segundo ensayo, en el que se marcaron los mejores cronos del día, habían invertido las posiciones logradas en el primero.
Pero fue el mexicano el que marcó la mejor vuelta este sábado en el último ensayo, previo a la muy trascendental calificación.
'Checo', tercero en el Mundial -a 25 puntos de su compañero-, tras acabar por tercera vez segundo en lo que va de año hace una semana en España, había mejorado en 41 milésimas al monegasco y en 370 a Sainz. Con Verstappen cuarto, a cuatro décimas; y Alonso décimo, a un segundo y una décima del bravo piloto tapatío, que en el Circuit de Barcelona-Catalunya había logrado su decimoctavo podio en la F1.
El francés Pierre Gasly (Alpha Tauri) -que por unas décimas cruzó tarde la línea de meta y se quedó sin poder lanzar un último intento- y el canadiense Lance Stroll (Aston Martin) quedaron eliminados en la primera ronda (Q1); en la que marcó el mejor tiempo Leclerc, sólo 47 milésimas más veloz que Sainz. Y en la que curiosamente, pasó ronda -antes de caer en la siguiente- el japonés Yuki Tsunoda, compañero del galo, a pesar de haber provocado la bandera roja del acto.
El finlandés Valtteri Bottas (Alfa Romeo) y el australiano Daniel Ricciardo (McLaren) fueron los más egregios eliminados en la Q2; en la que Leclerc volvió a marcar el mejor tiempo, esta vez de sólo 90 milésimas menos que el del mexicano y con 210 de ventaja sobre Sainz; tercero en el segundo acto.
Leclerc vuelve a volar
En la ronda decisiva, el monegasco, que nunca acabó una carrera en casa y que el año pasado -cuando Sainz concluyó segundo- ni siquiera pudo tomar la salida, al accidentarse en la vuelta de instalación después de haber firmado la 'pole', volvió a volar. Mejoró en 22, 25 y 29 centésimas, respectivamente, a Sainz, a 'Checo' y a 'Mad Max'.
El talentoso piloto madrileño y el nuevo ídolo deportivo de los Países Bajos se quedarán con las ganas de saber si hubiesen mejorado su crono de haber podido completar su último intento, frustrado por el accidente del mexicano y en el que se vieron involucrados. Pero las carreras son así; y en Montecarlo nunca se pueden descartar este tipo de circunstancias.
Alonso, dando lo sensación de disfrutar durante toda la 'cuali'; perdió el control del Alpine en Mirabeau y tampoco pudo mejorar su registro. Pero volvió a demostrar que es bastante más rápido que su compañero francés Esteban Ocon, que arrancará décimo, en la quinta fila, al lado del cuádruple campeón mundial alemán Sebastian Vettel (Aston Martin).
El genio astur lo hará por delante de ellos, en la cuarta fila, desde la que lo acompañará su otrora antagonista, el siete veces campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Mercedes), al que destronó el año pasado -en la última vuelta de la última carrera- Verstappen. Cuatro veces ganador este año y que no acabó las otras dos carreras: las que se anotó Leclerc.