El 12 de agosto de 2026 seremos testigo de un evento muy especial. Ese día, desde Euskadi podremos ver cómo la luna oculta el sol de forma total, convirtiendo el día en noche durante un rato. Este evento durará algo más de un minuto aquí, nos señala Javier Armentia, astrofísico del Planetario de Pamplona. 

Y, aunque los eclipses solares son relativamente frecuentes -uno o dos por año-, solo se ven en una pequeña fracción de la Tierra. Por eso lo convertimos en un auténtico espectáculo, pero tenemos que tener en cuenta algunas recomendaciones a la hora de observar uno de estos. Y es que no son inocuos.

Un eclipse solar, en una imagen de archivo. Pixabay

Javier Armentia, astrofísico y director del planetario de Pamplona, nos explica que cada vez son más las personas que escogen el turismo astronómico para planificar sus vacaciones.

Es decir, que sus vacaciones coinciden con eclipses y fenómenos astronómicos de cualquier punto del globo. Ya ocurrió con el eclipse que pudo verse en parte de América, y ahora es probable que ocurra con el que podremos ver aquí en un par de años

Pero siempre, ante todo, hay que seguir algunos pasos si vamos a observar un eclipse. “De cara a los tres eclipses que vienen en los próximos años -agosto del 26, agosto del 27 por el sur y finales del 28- se constituyó el año pasado una comisión nacional del eclipse, que depende de la comisión nacional de astronomía, donde estamos un grupo de expertos y comunicadores porque queremos aprovechar para que la gente lo pueda disfrutar de forma segura”, señala. 

Y es que en el que se dio en abril en Norteamérica, al día siguiente la pregunta más realizada a Google era “me duelen los ojos”, por parte de gente que había visto el eclipse sin la protección adecuada. Por eso la recomendación siempre es habitual: protegerse los ojos

El eclipse de abril. EP

Pero, ¿qué pasa con nuestras mascotas? No podemos ponerles gafas que protejan su vista de la influencia del eclipse. ¿Puede afectarles? La respuesta es clara. Si miran fijamente al eclipse puede pasarles exactamente lo mismo que a nosotros, que traiga consigo consecuencias que pueden ser graves e irreparables en sus retinas. 

Además, según Animal’s Health, “la oscuridad causada por un eclipse puede alterar sus relojes internos, provocando confusión y ansiedad”. Lo que nos recomiendan en caso de eclipse es que nuestras mascotas no salgan durante el mismo, manteniendo puertas y ventanas en casa cerradas, para protegerlas lo máximo posible.

Una joven con sus mascotas. The pretty girl embarcing cat and dog

Eso sí, Armentia señala que “los animales son mucho más listos que nosotros. Un perro no mira al sol. Puede echar vistazo para arriba para ver de dónde viene el sol”, explica el experto, que añade que, “de hecho, se ha estudiado la conducta animal en los eclipses”.

Y es que, como se hace de noche muy de repente, todos los animales que tienen conductas ligadas a la presencia o ausencia de sol, varían su comportamiento. “Animales de granja, al notar que hay un eclipse, se van a dormir. Los murciélagos suelen salir a cazar. Los insectos o las aves cantan”, enumera en ese sentido.

Respecto a los animales de compañía, asegura que “se van a volver locos porque nos van a ver locos a nosotros. Los humanos gritamos mucho cuando hay un eclipse”, sonríe en ese sentido. “Esto les afecta menos a los perros que los cohetes”, señala finalmente.

Un gato con unas chicas. Freepik

Perseidas en pleno día 

¿Se imaginan poder ver perseidas en pleno día? Pues eso será posible durante el eclipse del año 2026, pues coincide en agosto, plena época de perseidas. Este fenómeno podrá verse en pleno día, aunque no realmente, pues lo que ocurre con el eclipse es que, durante un rato, el día se convertirá en noche.

Podremos entonces aprovechar la ocasión para pedir nuestros deseos a las comúnmente conocidas como estrellas fugaces o lágrimas de San Lorenzo

Perseidas. EP