VIRTUAL y más que merecido ganador del Tour que, para nosotros, siempre será “el que salió de Euskal Herria”: No hay palabras para describir su gesta. Nadie dudaba, por descontado, de su inmensa y contrastada calidad. Sin embargo, hasta quienes más saben del deporte del pedal lo situaban, en el mejor de los casos, a la sombra del genio Tadej Pogacar. Pero no ha sido así. Desde el mismo instante en que se vistió de amarillo, demostró que era capaz de mantener a raya al explosivo esloveno, que parecía no resignarse a ir tras su estela. La estratosférica contra-reloj que protagonizó el martes pasado, sacándole más de minuto y medio a su correoso rival, terminó de dejarnos claro que sería el más que justo ganador de la ronda gala.
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