Los ayusers con acceso a tribuna pública siguen desatados. Hoy, nueva ofensiva, con El Mundo en cabeza, abriendo a todo trapo con una encuesta a mayor gloria de su lideresa. "Ayuso roza la mayoría absoluta", reza el titular de la información en el interior. Como complemento nutritivo, el consabido editorial recordando a Génova lo que vale un peine: "Desde Madrid, Ayuso es hoy un paradigma: frente al modelo intervencionista de Sánchez se erige como alternativa liberal desde una derecha sin complejos. Es este uno de los pilares de su éxito, saber aglutinar el voto desde el centro a la derecha, consiguiendo así fagocitar a Ciudadanos -que no levantaría cabeza tras el contubernio que trató de armar con el PSOE para expulsar a la presidenta- y mantener a raya a Vox".
En ABC, Agustín Pery insiste en la misma veta argumental. El PP de hoy sigue vivo gracias a Ella: "Deberían ser de Ayuso precisamente quienes hoy sobreviven gracias a la respiración asistida de su victoria incontestable, arrolladora y hasta humillante en Madrid. Ni rastro dejó de eso que llamaron el cielo rojo. Madrid fue un no pasarán inverso, el infierno encarnado de la izquierda. Y, abracadabrante, lo que debió ser trampolín resulta que es losa".
También en el vetusto diario, Isabel San Sebastián, imitando a Cicecerón, señala con el índice al presidente del PP. "¿Hasta cuándo, Casado, seguirás de perfil?", le pregunta en el encabezado e inmediatamente después deja para las antologías una frase que es imposible leer en voz alta sin ahogarse: "Cada día que pasa sin que el número uno del partido intervenga para acabar con este desatino, fijando la fecha del congreso popular de Madrid e impulsando una lista integradora que sitúe a Díaz Ayuso en la Presidencia y reparta equitativamente el resto de los cargos, contando por supuesto con Almeida pero reconociendo el derecho a formar su propio equipo que asiste a la mujer que el propio Casado designó en su día como candidata, es un día perdido para la construcción de una alternativa ganadora frente a Sánchez". La gallina.
En La Razón, Abel Hernández deja fuera de culpa a Casado y acusa, sin nombrar a ninguno, a unos supuestos malmetedores: "Enredador, según la Academia, es sinónimo de chismoso o embustero. María Moliner añade que «se aplica a persona que despliega actividad inútil, inclinada a enterarse de los asuntos de otros y a intervenir en ellos; que complica intencionada o involuntariamente, las cosas en que interviene; en suma, que introduce desorden o confusión con su actividad o intervención». Es lo que está pasando en este caso. Si algo se echa en falta es un gesto de autoridad de Pablo Casado para pararles los pies y cerrar las ventanas durante las discusiones de familia". Ni un nombre, insisto.
Para no eternizarnos, cierro el capítulo de hoy de la gresca Génova-Sol con un entrecomillado que firma en El Español un tal Daniel Ramírez. De lo más lírico, como verán: "En la Plaza del Perú, según mi amigo, sobrevolaban gaviotas. A Génova, si nada cambia, llegarán los buitres. Porque no se trata del invierno. El color blanquecino de los dirigentes del PP es el que uno viste cuando se acerca al cementerio". No duden que habrá continuación.
Lágrimas de pena y rabia por el derrocamiento de Albiol
Antes de la despedida y cierre, comparto con ustedes la bilis derramada por la destitución de Xabier García Albiol como alcalde de Badalona. "Felonía consumada", brama en La Razón Jorge Fernández Díaz, antes de advertir de que habrá revancha en las próximas elecciones: "El sanchismo que pretende imponernos por ley la memoria que debemos tener de nuestra Historia, va a tener ocasión de verificarlo en las próximas elecciones dentro de dieciocho meses en Badalona, y en muchos otros lugares de Cataluña y de toda España. Y nuestro deber es recordarlo para que nadie lo olvide cuando tenga la oportunidad de expresarlo al ser convocados a las urnas".
"Albiol es malo, no como ETA", titula Antonio R. Naranjo su pieza en El Debate. Ahí les suelto un entrecomillado: "Pero quedaba feo que en Cataluña sobreviviera un alcalde español denunciando el Gulag y gestionando problemas antes que emociones, y allí ha acudido raudo el PSOE a salvar al municipio por el sorprendente procedimiento de entregárselo a sus peores cuatreros".
La guinda corre a cargo del tonante Miquel Giménez, que también se apunta a la metáfora del latrocinio. Antes de vaticinar, cómo no, que habrá final feliz: "La banda separata- social comunista lo ha hecho por tercera vez: Albiol no es alcalde. Un atraco a los electores, pero a ellos qué más les da. Pero el gigante bueno es mucho gigante para estos enanos, enanas y enanes. Estoy seguro de que volverá a ser alcalde. Vaya si volverá. Y esta vez con mayoría absoluta. Al tiempo".