Nuestros invitados son amantes de la fotografía. De hecho, Unai Altolagirre, diseñador gráfico de profesión, asegura que lo que se ha convertido en una herramienta de trabajo más en su día a día, es en realidad su verdadera pasión, sobre todo en su tiempo libre. En sus proyectos profesionales utiliza su Canon 7D, aunque tiene la Sony Alpha 7R en mente. "Quiero dar el salto, pero no me decido. Le tengo echado el ojo a un objetivo de Sigma de la serie Art Zoom, de 35 mm, pero estoy en duda porque con un adaptador no conseguiría sacarle partido a todas sus prestaciones".
Su primera cámara la recuerda con mucho cariño. "Me la regaló mi tío, y aunque no recuerdo la marca, porque no era conocida, le tenía muchísimo aprecio", advierte. Echa de menos su sistema de enfoque. "Era una cámara de finales de los ochenta y era muy sencilla de manejar", destaca.
CON TODO DETALLE
Por trabajo, fotografía cualquier objeto que haga falta en sus composiciones, hasta el más mínimo detalle. Incluso utiliza a su mujer Ainhoa, y a sus hijas, Garazi y Maddi, como modelos siempre que hace falta. Cuando trabaja utiliza siempre la cámara profesional, pero tampoco desaprovecha la oportunidad de hacer fotografías con el móvil cuando va en familia. En su tiempo libre le gusta fotografiar todo lo que hacen juntos. "Empecé a sacarle fotos a Ainhoa en un viaje a Florencia. Ella iba por un lado viendo la ciudad y yo por otro sacando fotos. ¡Tienen muchísima paciencia conmigo!", exclama.
