La frecuencia con la que se deben lavar las toallas para evitar enfermedades es un tema de debate. Algunos creen que una vez a la semana es suficiente, mientras que otros piensan que es necesario hacerlo con mayor asiduidad. En cualquier caso, no hacerlo puede afectar a la salud, pues la humedad favorece la proliferación de hongos y otros organismos.

Cada uso transfiere células muertas, sudor y residuos a la toalla, creando un ambiente ideal para las bacterias. Los principales riesgos incluyen irritación de la piel e infecciones por bacterias, así como mal olor.

Toallas de algodón de distintos colores en el tambor de la lavadora. Freepik

¿Con qué frecuencia hay que lavar las toallas?

Los expertos en salud y limpieza aconsejan lavar las toallas de baño tras tres usos. Dicho de otro modo, si te duchas a diario, cambiar la toalla cada tres días. Esta frecuencia de lavado ayuda a reducir la acumulación de bacterias, además de mantenerlas frescas. 

Por su parte, las toallas de mano deberían lavarse cada dos días, mientras que las toallas de cocina, al estar en constante contacto con alimentos y superficies, es mejor a diario para evitar una contaminación cruzada y el crecimiento de las bacterias.

Para asegurar que la limpieza es efectiva, es necesario lavar las toallas a altas temperaturas, comprobando de que se sequen por completo entre cada uso. Asimismo, los especialistas recomiendan no compartir toallas personales para evitar la propagación de bacterias y virus.

Cómo lavar y desinfectar las toallas

Para mantener las toallas limpias, es clave saber cómo lavarlas y desinfectarlas correctamente, ya que esto contribuye a reducir el riesgo de enfermedades causadas por virus o bacterias. 

Las toallas, esenciales para el aseo personal, deben estar en buenas condiciones de limpieza. Es necesario cambiarlas frecuentemente y evitar su exposición a la humedad, ya que esto provoca la acumulación de moho y bacterias, causando malos olores o problemas en la piel. 

Cinco trucos para unas toallas impolutas 

Para lavar las toallas con efectividad, estos son los mejores trucos a tener en cuenta.

Peróxido de hidrógeno 

Se recomienda usar peróxido de hidrógeno para lavar toallas claras y vinagre blanco destilado para las oscuras. Ambas opciones caseras ayudan a evitar el uso de lejía, que es más contaminante. Estos métodos son efectivos para mantener las toallas limpias sin dañar el medio ambiente.

Aceite o semilla de pomelo 

Para desinfectar toallas en la lavadora, se recomienda añadir aceite o semilla de pomelo, útil contra enfermedades infecciosas. También son efectivos los productos de limpieza con aceite de pino entre sus ingredientes, ya que actúan como desinfectantes.

Bicarbonato de sodio y vinagre blanco

Utiliza una mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre blanco para lavar las toallas. Primero, introduce las toallas en la lavadora con agua caliente y vinagre. Después del ciclo, repite el proceso, esta vez añadiendo bicarbonato de sodio. Finalmente, deja secar completamente las toallas para asegurar su limpieza y desinfección.

Vinagre de limpieza

Para obtener toallas suaves y esponjosas, el vinagre de limpieza es ideal. Basta con agregar media taza de vinagre blanco en el cajetín del detergente. Este producto actúa como un poderoso desodorizador y suavizante natural, especialmente efectivo en prendas destinadas a la absorción de humedad, como toallas y ropa deportiva.

Apuesta por el agua 

Si prefieres no usar vinagre en la lavadora, remoja las toallas durante una hora en un barreño con agua, vinagre y jabón. Después, retira el exceso de agua y lávalas en la lavadora como de costumbre. Esto eliminará el mal olor y dejará las toallas más suaves.

Un niño mete algunas toallas a la lavadora. Freepik