El otoño se nota cada vez más, y nada mejor que un menú de fin de semana que celebre los sabores de la temporada. Te proponemos tres recetas sencillas, sabrosas y llenas de color para hacer en casa: garbanzos con pisto, empanadillas de calabaza y queso de cabra, y compota de manzana con canela, miel y frutos secos.

Primer plato: Garbanzos con pisto

Nada despierta mejor el apetito que un plato cálido, nutritivo y lleno de color. Los garbanzos con pisto son la combinación perfecta entre la suavidad de los garbanzos cocidos y la intensidad de las verduras, como el calabacín, el pimiento y el tomate. Cada bocado ofrece una textura cremosa, mientras los colores otoñales de las verduras llenan la mesa de calidez. Este plato no solo es delicioso, sino fácil de preparar, aportando una sensación reconfortante, ideal para los días frescos.

  • Tip: añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra antes de servir y realza los aromas.

Segundo plato: Empanadillas de calabaza y queso de cabra

Las empanadillas de calabaza y queso de cabra son un auténtico festival de sabores y texturas que evocan los sabores del otoño. La dulzura natural de la calabaza se combina con la suavidad y el toque ligeramente ácido del queso de cabra, creando un contraste delicado y sofisticado. La masa, crujiente y dorada, aporta el equilibrio perfecto entre lo cremoso y lo crujiente. Además de su sabor, estas empanadillas llenan la cocina de un aroma hogareño que invita a sentarse y disfrutar sin prisa. Son ideales para compartir en familia o en una comida informal de fin de semana, y su preparación, sencilla pero gratificante, permite disfrutar del proceso tanto como del resultado.

Empanadillas de calabaza y queso de cabra. María Malo

Postre: Compota de manzana con canela, miel y frutos secos

Para cerrar este menú, nada mejor que un postre ligero, aromático y lleno de sabor. La compota de manzana es suave y dulce, perfecta para equilibrar la comida, mientras que la canela añade calidez y profundidad de sabor. La miel suaviza la mezcla con un toque natural y delicado, y los frutos secos aportan textura y un pequeño crujido en cada cucharada. Este postre no solo celebra los sabores de la estación, sino que también se convierte en una receta sencilla, para un final dulce sin resultar pesada.

Manzanas rellenas de compota y frutos secos, un postre muy original. María Malo

Este menú completo es la propuesta ideal para disfrutar del otoño en casa. Tres recetas que combinan sabores, texturas y productos de temporada, haciendo de cada plato un pequeño placer para el paladar. Desde la calidez de los garbanzos con pisto, hasta el contraste delicado de las empanadillas de calabaza y queso de cabra, y el toque dulce y aromático de la compota de manzana. Cada comida se convierte en un momento acogedor y lleno de sabor para compartir con familia o amigos.