Cuando se pasan muchas horas fuera de casa por el trabajo es muy importante almorzar para no llegar a la hora de la comida con un hambre voraz. A media mañana, el cuerpo necesita alimentarse para recargar fuerzas.
Por supuesto, resulta imprescindible que lo que se elija como almuerzo sea sano. Para cuidar la salud y evitar indeseables picos de glucemia no podemos calmar nuestro apetito con opciones como ultraprocesados repletos de azúcares y grasas.
Lo mejor, según los expertos, es apostar por elecciones como estas:
Fruta fresca o tomates cherry
Manzanas, peras, plátanos, naranjas, ciruelas o fresas son alternativas fáciles de transportar y llenas de vitaminas y fibra. Para facilitar su consumo se puede llevar troceados en un tupper. Otra opción muy rica y saludable son los tomates cherry. Escoge la variedad que más te guste (cherry pera, cherry kumato, etc.) y conviértelo en un almuerzo básico, porque es una opción distinta con la que estarás aportando un chute de antioxidantes a tu organismo, pues el tomate es rico en vitamina C y licopeno.
Rodajas de zanahoria y calabacín
Pela las verduras y córtalas en rodajas finas. Mézclalas con tus especias y hierbas favoritas, como orégano, pimienta blanca, romero y pimienta negra recién molida, y añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra.

Frutos secos
Almendras, pistachos, avellanas o nueces son opciones prácticas y nutritivas que proporcionan un buen chute de energía.

Crackers de semillas
Son una opción crujiente y salada que se puede combinar con hummus o cualquier otro dip. Ricos en fibra y grasas saludables, estos crackers son ideales para mantener la energía durante el día.

Yogur natural o griego
Solo o mezclado con granola, frutas, semillas o incluso una cucharada de miel. Es un aperitivo de lo más completo para tomar a media mañana.

Tortitas de maíz o arroz
Es un snack fácil de llevar en el bolso, ya está elaborado y es bajo en calorías. Se pueden encontrar con diferentes sabores, pero no está de más leer las etiquetas para controlar el consumo de sal.
Palomitas de maíz
Es otra opción muy fácil de realizar y que destaca por ser pobre en calorías pero saciante debido a la presencia de fibra. Eso sí, opta por las palomitas caseras, que solo llevan maíz, aceite y sal, en lugar de las de bolsas preparadas para hacer en microondas.
Barritas energéticas
Puedes prepararlas en casa o comprarlas en el supermercado. Debemos de tener cuidado al elegir esta opción ya que hay algunas barritas que están cargadas de azúcares refinados, edulcorantes e ingredientes pocos saludables.
Batidos
Para los amantes de los batidos, un smoothie verde hecho con espinacas, kale o pepino, combinado con frutas frescas, es una excelente manera de mantenerte hidratado y lleno de energía. También se pueden elaborar con fresas, plátano, frutos rojos... Es cuestión de probar.

Hummus con palitos de verduras
Es una crema elaborada con garbanzos cocidos, tahín, aceite, limón y pimentón. Es ideal para los que prefieren algo salado. Se puede tomar acompañado de colines de pan integral o con palitos de zanahoria. Otra alternativa es el guacamole, ya sea casero o comprado, pero en este último caso hay que fijarse en sus ingredientes.