El Ayuntamiento de Vitoria, la Diputación de Álava y el Gobierno Vasco (Euskal Trenbide Sarea (ETS) alcanzan un acuerdo para financiar y ejecutar la ampliación del tranvía a Zabalgana, así como la construcción de las nuevas cocheras de Betoño y la prolongación del trazado desde la parada actual de Salburua hasta Betoño.
Aldaia y Mariturri
El convenio, aprobado hoy por el gabinete Etxebarria, contempla un presupuesto de 121 millones de euros, sin IVA. Abarca un trazado con dos ramales en Zabalgana: Aldaia y Mariturri, y un tramo común hasta Lovaina pasando por San Martín.
En total, 11 paradas y una distancia media entre ellas de 560 metros.
Las frecuencias previstas son cada 15 minutos en los ramales y cada 7,5 minutos en el tramo común.
Además, la ubicación de las cocheras en Betoño obliga a reorganizar las líneas actuales, que pasarán a operar como Ibaiondo-Universidad y Abetxuko-Salburua.
Financiación
En cuanto al coste para cada una de las tres instituciones vascas, el convenio establece un esquema de cofinanciación que queda de la siguiente manera:
- ETS aportará el 65% del coste de la ampliación del tranvía a Zabalgana y el 100% del coste de las nuevas cocheras de Betoño, además del conjunto de sus medidas compensatorias ambientales. Su aportación asciende a 88,4 millones de euros.
- La Diputación Foral de Álava financiará el 17,5% de la ampliación, con una aportación total de 16,14 millones de euros.
- El Ayuntamiento de Gasteiz aportará el 17,5% restante, otros 16,14 millones de euros: 378.000 euros en 2026, 4,3 millones en 2027, 5,6 millones en 2028 y 5,7 millones en 2029.
Vitoria también asumirá diversas medidas compensatorias propias derivadas de la declaración de impacto ambiental. Entre ellas, actuaciones en el humedal de Salburua, la adquisición y custodia de terrenos para compensar la pérdida de superficie natural y el análisis del sistema de drenaje pluvial del barrio.
36 y 24 meses
Además de la aportación económica, el Ayuntamiento garantizará la disponibilidad de los terrenos necesarios para la obra, aprobará los proyectos de urbanización y gestionará los desvíos de tráfico durante las obras.
Asimismo, una vez finalizada la infraestructura, asumirá el mantenimiento de la urbanización exterior a la plataforma tranviaria.
Las obras de la ampliación tendrán un plazo estimado de ejecución de 36 meses, mientras que las de las cocheras se desarrollarán en 24 meses.
Las tres instituciones supervisarán el avance del proyecto y resolverán las incidencias, con el fin de que el tranvía a Zabalgana esté operativo para finales de esta década.