30 medidas para conseguir que “las vidas de todas estén en el centro”

Los jardines Etxanobe, junto a la Casa de las Mujeres, fueron el escenario elegido por la tarde por la plataformaDenon Bizitzak Erdigunerapara presentar una tabla con más de 30 reivindicaciones, donde se definen los pasos a dar hacia “un sistema de cuidados público y comunitario en Álava”, con el objetivo de “que las vidas de todas estén en el centro”. Para lograrlas, anunciaron que seguirán interpelando tanto a las instituciones, “como a las empresas de cuidados, a los hombres, a los individuos y a la sociedad”.

Así, entre esas medidas surgidas, tras la unión de feministas de diferentes comarcas, más la colaboración con trabajadoras del sector y la puesta en marcha de un grupo de motor que ha orientado el proceso y de un “mapeo” en diferentes pueblos y barrios, realizado desde diciembre a marzo para identificar las necesidades, figura la “publificación progresiva” de todos los servicios de cuidados existentes para personas mayores, con dependencia y/o discapacidad y que los de nueva creación sean públicos.

“Dignas”

También pretenden condiciones laborales “dignas” para todas las trabajadoras de cuidados, la abolición de la Ley de Extranjería y la regularización “para todas las migradas”.

Asimismo, buscan garantizar y descentralizar los servicios públicos en la zona rural en las ocho cuadrillas de Álava y también dar pasos hacia un sistema de cuidados feminista y comunitario (no familiarizado, no racializado y no sexista). Y conseguir actividades extraescolares, colonias, custodia y apoyo escolar públicas y gratuitas “libres de brechas sociales”.

En materia de diversidad funcional y discapacidad, condiciones laborales “dignas” en los centros de empleo especial.

Otra de sus reivindicaciones persigue el reconocimiento de las trayectorias y vidas de personas mayores trans, “especialmente mujeres trans que fueron excluidas del ámbito laboral”, con recursos para su atención de sus necesidades y tratamientos necesarios para su salud mental.

Igualmente, desean equiparar las pensiones mínimas a salario mínimo y que el cuidado esté centrado en la persona, “que sea escuchada y que sea partícipe del diseño del modelo de cuidados en espacios de participación ciudadana”.