Primero colocaron las señales verticales y, ahora, ultiman el pintado del suelo que marca los caminos escolares seguros implantados con éxito en Salburua.

La iniciativa en la que se ha implicado el barrio culmina con la finalización del curso escolar, con el propósito de que su pionera actuación sirva de ejemplo para otros barrios y pueda extenderse al resto de Gasteiz.

Paso de cebra señalizado por Eskola Bideak Salburua. Pilar Barco

“Cada vez más personas acuden tanto a pie, en bicicleta, como en patín a los centros educativos, lo cual consideramos que favorece la implantación de este tipo de proyectos”, valoran los responsables de Eskola Bideak en la memoria del proyecto.

Salida desde Arkaiate

Son las 8.40 horas y los escolares comienzan a asomar por la parada de autobús de la L-6 de Arkaiate.

Como tantos otros días, quedan en la marquesina de Ilíada para ir en grupo al colegio. Unos lo hacen a pie, otros en bici, pero todos, siguiendo la senda segura que los mayores les marcan.

Caminos escolares

“Los caminos escolares han ayudado a afianzar un ecosistema educativo en el barrio, más allá de los límites del espacio físico que disponen los centros educativos”, subrayan los adultos. 

Se trata de una iniciativa para fomentar que los escolares puedan acudir a clase por su cuenta sin necesidad de que sus aitas les lleven en coche y sin miedo a ser arrollados.

Al mismo tiempo, “esta situación está impulsando la creación de una red activa de personas que posibilita la activación de otros proyectos participativos en Salburua: desfile de Carnaval, comedor de barrio..., subrayan desde Eskola Bideak.

Pintura para señalizar

“El Ayuntamiento nos ha facilitado los botes de pintura para señalizar los pasos de cebra y cruces más peligrosos, pero ya se nos están acabando", explica Iosu Aranbarri.

"Hemos pintado más o menos toda la zona de Salburua, entre 30 y 40 lugares y otros tantos nos faltan por la parte de Aranzabela”, concreta.

En gris, blanco y verde

Aranbarri ha pasado horas a pie de asfalto marcando los caminos escolares en gris, blanco y verde, con un logo circular en el que se lee: Eskola Bideak, en ocasiones, junto a los propios escolares.

Señalizando el camino al colegio. Cedida

Querían haberlo hecho unas semanas antes, pero la climatología no ha acompañado, con lo que se les ha echado el final de curso encima.

Vacaciones

“Los chavales se van ya de vacaciones, así que va a ser más complicado quedar con ellos, pero igual todavía nos animamos algún día más a pintar, aunque damos ya por concluido el proyecto”, apunta, satisfecho.

“A pie o en bici, en cualquiera de los casos se evita el coche en los trayectos y las dobles filas a la entrada de los colegios”

Iosu Aranbarri - Eskola Bideak

Cada día, por grupos, los escolares quedan en los denominados topagunes, puntos de salida, e inician el itinerario, por ahora, acompañados por mayores.

En bicicleta al 'cole'. Pilar Barco

“La idea es que, de forma progresiva, vayamos desapareciendo los adultos, pero antes hay que dar seguridad a las familias”, entiende Aranbarri.

En principio, el programa va dirigido a niños y niñas a partir de 8-9 años, pero hay de todo, ya que un hermano mayor se lleva a la hermana pequeña...

Distancia al 'cole'

Depende del perfil de las familias. Los que viven más lejos del colegio, a un kilómetro o más, optan por ir en bicicleta o patinete, pero los que residen en un radio de medio kilómetro, prefiere caminando. 

“En cualquiera de los casos, se evita el coche y las dobles filas a la entrada de los colegios, aunque no vayamos a eliminarlas completamente”, entiende Aranbarri.

Seguridad y autonomía

Los proyectos de caminos escolares son iniciativas dirigidas a que las personas, especialmente en edad escolar, puedan moverse con seguridad y autonomía por las calles de la ciudad y recuperar el uso y disfrute del espacio público, con el objetivo final de mejorar en salud y autonomía.

'Logo' pintado en el asfalto. Pilar Barco

Asimismo, la promoción de la movilidad activa en el entorno escolar tiene el potencial de convertirse en un instrumento eficaz para aumentar el grado de concienciación desde edades tempranas sobre la importancia de la actividad física, tan beneficiosa para la salud.

Uso del espacio público

Así, el proyecto Eskola Bideak Salburua nace en 2019 a partir de la sensibilidad de personas que, en base a una década de convivencia en el barrio, pensaron que era necesario crear nuevos espacios de convivencia en los que la ciudadanía gozase de preferencia a la hora de usar el espacio público.

Al mismo tiempo se favorecen las relaciones sociales y la salud del vecindario. 

Después, llegó la covid y la iniciativa se ralentizó. Superada la pandemia, comenzaron de nuevo pico y pala, convencidos de los beneficios ambientales, sanitarios, económicos, de seguridad vial y hasta psicológicos y sociales que tienen los caminos escolares. 

Contaminación

Además de la contaminación de los coches, “los automovilistas conducen con más cuidado al ver a personas en grupo y con una señalización adecuada.

Los accesos a las escuelas se vuelven más transitables, menos caóticos y se reduce el riesgo de atropellos”, resaltan en su balance.

En Eskola Bideak Salburua han participado familias, asociaciones vecinales, direcciones y claustros de los centros educativos del barrio (Arantzabela, Salburua, Errekabarri), comerciantes, Ayuntamiento, centro cívico y personas a título particular. 

El papel de los comerciantes

En todo este camino, resalta Aranbarri la implicación de los comerciantes que se han ofrecido para asistir a los escolares en caso de que pidan ayuda de camino al cole.

Hasta la fecha, se han adheridos 24. De hecho, estos bidelagun ya se han estrenado.

Cuenta Aranbarri que hace unas semanas, un crío se perdió en el Parque del Este, camino del colegio y le ayudaron desde la librería Paperprint.

Eskola Bideak Salburua

  • Caminos escolares. Son los trayectos que se han diseñado y marcado para que los escolares vayan de sus casas a los centros escolares y regresen. 
  • Bidelagun. Son comercios, centros y locales ubicados en el recorrido de los caminos escolares que se prestan a ayudar a niños y niñas en caso de que necesiten ayuda durante el trayecto. El protocolo manda que, en caso de que los escolares faciliten el teléfono de algún familiar o persona cuidadora, se pongan en contacto con ella. Si no es así, llamar al centro educativo del menor, que permanecerá en el lugar hasta que alguna persona acuda a recogerle.

Un dato

  • Establecimientos de Salburua lucen ya en el exterior de su negocio la pegatina con el logo Eskola Bideak, que les identifica como bidelagun. Son los que hasta la fecha se han adherido a la iniciativa.

Y es que, estos centros, locales y comercios ubicados a lo largo del recorrido de los caminos escolares lucen en el exterior del establecimiento la pegatina que les identifica como colaboradores.

En caso de perderse...

Así, en caso de que cualquier escolar les facilite el teléfono de algún familiar o persona cuidadora, el protocolo manda contactar con ella; si no, llamar al centro escolar; el menor permanecerá en el sitio hasta que alguna persona vaya a recogerle.

Cruzando un paso de cebra. Pilar Barco

Panadería Lakua-Arkaiate, La Vitoriana-París, cafetería Viena, centro de salud de Salburua, centro cívico, Paperprint, Bost Argi, Biketoki bizikletadenda, Invernaderos Ruiz, Adats ileapaindegia, Errekabarri ikastetxea, Lanbide, Iliada Kafetegia y Kattagorri haurreskola.

También Manduca, Black Moon, Salburua ikastetxea, Behiak Harategia, Ikastola Arantzabela, Arua, Kokoloko ilepaindegia, Academia Salburua, ONest, Txioka… ya son bidelagun, entre otros establecimientos del barrio, y más que se van a sumar.