La falta de suministro que presentan ciertos medicamentos en las farmacias alavesas, no es un problema distintivo del territorio; sino que afecta también a boticas de otras provincias y comunidades autónomas del Estado. De esta forma lo señala la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Álava, Milagros López de Ocáriz. 

Las situaciones de falta de suministro en las farmacias alavesas no es un hecho exclusivo del territorio, sino que también se da de forma simultánea en el resto de establecimientos nacionales, ¿no es así?

Efectivamente, la distribución de medicamentos tiene una cobertura nacional, por lo que cuando existen incidencias de suministro, estas suelen afectar a todo el Estado.

¿Por qué puede producirse el desabastecimiento de algunos fármacos? Es decir, ¿cuáles son las causas? 

Las causas de los desabastecimientos son diversas, no hay una única causa, y pueden ser debidas a problemas en la fabricación, a la escasez de materias primas, al incremento puntual de la demanda, a problemas en la distribución del medicamento, etcétera. A veces, el desabastecimiento puede afectar a varios países. Por otro lado, también hay que tener en cuenta que la industria farmacéutica no es ajena a las incidencias que pueden afectar a todo el sector industrial respecto del acceso a principios activos y materias primas, cartonaje o emblistados, entre otros.

¿Cuáles son esos fármacos que han presentado una falta de suministro recientemente?

En la web de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se publica la información de los medicamentos que actualmente tienen problemas de suministro. Esta lista es dinámica y se va actualizando con los datos disponibles en cada momento. Para cada uno de los medicamentos afectados, la AEMPS indica qué alternativa existe para la continuidad del tratamiento: otro medicamento de igual composición, otro medicamento de diferente composición con la misma indicación terapéutica, etcétera. En este sentido, la lista de fármacos puede parecer amplia, pero es cierto que la mayoría dispone de alternativa terapéutica, por lo que el paciente va a poder continuar con su tratamiento. El problema radica cuando el medicamento es de los que llamamos huérfanos, destinados a un grupo reducido de pacientes y enfermedades poco prevalentes. En estos casos las autoridades sanitarias establecen medidas excepcionales como un suministro controlado, la autorización de la importación de medicamentos extranjeros, o la formulación magistral, entre otras opciones. 

¿A qué grupo terapéutico pertenecen los medicamentos que mayor escasez presentan? 

–Los medicamentos donde se han notificado más problemas de suministro son los utilizados para el tratamiento de enfermedades del tracto digestivo y metabolismo, seguido por el grupo de medicamentos utilizados para el sistema nervioso y los utilizados para los órganos de los sentidos.

Actualmente hay contabilizadas más de 800 referencias con problemas de suministro activo, según los últimos datos hechos públicos por la AEMPS, pero este dato incluye las diferentes preparaciones de un mismo fármaco. ¿En qué otros formatos puede presentarse ese medicamento?

–Existe una gran variabilidad de formatos, dependiendo de su vía de administración. Por ejemplo, si es de tipo oral podemos disponer de cápsulas, comprimidos, sobres, jarabes, etcétera. 

¿De qué forma se clasifican los fármacos en ese listado de desabastecimiento?

Hay varias formas para clasificar estos problemas de suministro, pero principalmente se realiza en función del grupo terapéutico al que pertenecen, a través de la clasificación Anatómica, Terapéutica, Química (ATC)

¿Podría citarnos algún ejemplo de sustitución de los medicamentos que presenten esa falta de suministro? 

Cada caso se debe evaluar individualmente, en función del medicamento, del paciente y de las alternativas disponibles. En muchos casos, en la propia oficina de farmacia se resolverá este tipo de situaciones, y si no es posible, se derivará al prescriptor para que valore otras alternativas. Por su parte, la Organización Farmacéutica Colegial dispone de dos herramientas útiles para abordar los problemas de suministro de medicamentos. Por un lado CISMED, que permite a las oficinas de farmacia notificar en tiempo real los problemas de suministro que detectan. Por otro lado FARMAHELP, que conecta a las farmacias entre sí para poder dar una solución al paciente en el caso de que alguna de ellas no disponga del medicamento solicitado.

En marzo se dio a conocer, a nivel de Euskadi, un nuevo convenio que pretende impulsar una red de comunicación para mejorar la gestión de los problemas de suministro, actuar de forma más ágil y evitar un posible perjuicio a pacientes. ¿Está ya activo este sistema? 

Efectivamente, recientemente se ha firmado un convenio entre el Departamento de Salud, Osakidetza, los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Euskadi y los almacenes de distribución farmacéutica para establecer un protocolo de comunicación sobre situaciones de desabastecimiento de medicamentos. Este sistema está ya operativo.

¿Qué puntos novedosos puede destacar de esta nueva herramienta comunicativa?

Mediante este protocolo se crea una red de comunicación entre todos los agentes involucrados para mejorar la gestión e información sobre los problemas de suministro, y facilitar el acceso a la información relacionada sobre cada desabastecimiento. En el momento que cada agente involucrado detecte una situación de desabastecimiento en su ámbito de actuación, lo comunicará a la Dirección de Farmacia del Gobierno Vasco que a su vez, tras analizar cada notificación, dará traslado a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, hará un seguimiento, se determinarán las acciones reguladoras y se difundirán a los interesados.