Tres años después de la firma del protocolo de intenciones para poner en marcha el Memorial del 3 de Marzo en la iglesia de San Francisco de Zaramaga, la constitución de la Fundación que regirá el espacio supuso hace justo hoy dos semanas el pistoletazo definitivo a este anhelado proyecto.
El camino hasta llegar aquí ha sido largo y complicado, pero la asociación de víctimas Martxoak 3 ha insistido este jueves, en vísperas del 48 aniversario de la masacre, en lanzar un mensaje optimista en el inicio de esta "nueva fase".
"Se nos va a tener en cuenta, sin ninguna duda", ha verbalizado Arturo Val Del Olmo, testigo directo de la brutal intervención de la Policía Armada en 1976, que junto a Nerea Martínez representará a la asociación en el patronato de la Fundación
Ambos han confiado en que el "trabajo compartido" y la "coordinación" primarán a partir de ahora entre las partes en el proceso de creación del Memorial que se avecina, como recoge el convenio recién firmado por Martxoak 3 con el Instituto vasco de la Memoria (Gogora).
Un inventariado
El colectivo, que ha designado al historiador Julen Díaz de Argote como responsable del equipo que desarrollará el proyecto para el diseño del futuro Memorial, ha lanzado también sus primeras aportaciones para dotar de contenido el espacio.
Como primer objetivo, Martxoak 3 va a realizar un inventariado de todo el patrimonio material existente en manos de las personas que vivieron la masacre, empezando por los integrantes de la propia asociación y siguiendo después por todas las personas que lo deseen.
Artículos tan variados como munición policial, ropa de calle y de trabajo, herramientas, nóminas, billetes de viaje, maletas, partes médicos, casetes, discos, grabaciones, bolsas de la compra, cuadros, carteles, fotografías, pegatinas, revistas, recortes de prensa, octavillas o documentación entrarían en este variado grupo.
Mirando a Chile
El objetivo no es otro que saber cuáles son los objetos de la época que se guardan, no solo los vinculados a las huelgas de 1976 sino también al contexto de la época y sus antecedentes, así como todas las expresiones materiales de años posteriores relacionadas con la memoria del 3 de Marzo.
Díaz de Argote ha explicado que el colectivo establecerá un protocolo de donaciones basado en metodologías y experiencias internacionales como la utilizada en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos de Santiago de Chile.
Las "huellas" de la masacre
Por otra parte, Martxoak 3 va a proponer la realización de un análisis topográfico de la iglesia de San Francisco, previo a su necesaria remodelación, para catalogar, proteger y mantener todas las huellas de la masacre que todavía hoy existen en ella, como los balazos en la pizarra que envuelve el edificio y sus cristaleras.
Junto a esta intervención, la asociación de víctimas aboga también por poner en marcha una intervención arqueológica en el antiguo foso de cerca de medio metro que rodeaba el templo, tapado posteriormente, pues en este espacio puede haber cristales, casquillos y objetos de todo tipo enterrados desde aquel 3 de marzo de 1976.
Martxoak 3 ha solicitado a las instituciones el último borrador del proyecto constructivo del Memorial para asesorar en su redacción y ha solicitado también un encuentro con Gogora para establecer "una metodología, unos objetivos de trabajo" y un "cronograma compartido" para la construcción del Memorial, con fechas concretas.
